El diplomatico afirma que el balance de fuerzas cambió y que EEUU depende cada vez menos del crudo venezolano. A su juicio, hemos avanzado hacia una posición de debilidad por estrategias poco 'racionales'
Cuatro años como embajador de Estados Unidos en Venezuela fueron suficientes para que Charles Shapiro se llevara un cargamento de amistades y la preocupación por lo que pasa en el país, que a decir del diplomatico 'no es un secreto para nadie'.Shapiro, que arribó en marzo de 2002 y se fue en septiembre de 2004, vivió uno de los peores momentos de nuestra historia democratica, por lo que sostiene que 'un año en Venezuela vale por cuatro en cualquier otro país del mundo'.Hoy, desde la presidencia del Instituto de las Américas, lleva muy de cerca el pulso de los acontecimientos que afectan el mercado nacional en materia petrolera y energética.Aunque quiere ser optimista, considera que Venezuela esta desfasandose con respecto a los cambios de la realidad energética mundial.
Así lo contó a El Mundo Economía y Negocios, en el marco de la celebración de la XXII Conferencia de Energía en La Jolla, California (EEUU), donde Venezuela no tuvo representación, pero dio de qué hablar.-¿Cómo ve a Venezuela en el concurso energético mundial de cara a las nuevas fuentes no convencionales como el gas y el crudo de lutitas y los desarrollos que avanzan en varios países de la región?La tecnología esta facilitando la extracción de crudo y gas y los países pueden decidir hacerlo o no. México, por ejemplo, esta intentando reformar las leyes para que haya mas inversión en el sector energético y abrirse a la posibilidad de recibir a empresas transnacionales del petróleo que miran con atención lo que esta pasando con los mexicanos porque, ademas, estan apostando por las energías no convencionales. En Brasil también estan pasando cosas de manera muy acelerada, se ha descubierto mucho petróleo costa afuera y se trabaja también en tierra firme. Colombia no se queda atras: es el fenómeno de la región.-¿Cómo encaja el país dentro de este contexto?Imagino que Venezuela quiere aumentar su producción de crudo y, para ello, se necesitan dos cosas: lo primero es el capital y lo segundo la tecnología.
-¿Puede asumir el reto?Es una decisión que cada país debe tomar conforme defina sus metas. Fíjate una cosa. Yo volví a Estados Unidos en septiembre de 2004 y, en ese entonces, los dirigentes políticos siempre decían que si Estados Unidos hacía esto o lo otro, ni una gota de petróleo iba a llegar para alla. Pero creo que ese juego de fuerza ha cambiado por completo porque no estamos hablando de que Estados Unidos dependa del petróleo de Venezuela, creo que ahora es al revés.El diplomatico comenta que pese a que Venezuela gana mas por barril vendido a los Estados Unidos, el Gobierno por razones políticas ha decidido enviar crudo a China, India y a otros países. 'Eso no tiene racionalidad económica para Venezuela', opina Shapiro.-¿Por qué evalúa de esta forma la estrategia gubernamental?Venezuela tiene muchos problemas ahora. Falta de inversiones, alta inflación , escasez, inseguridad, pero ademas algo interesante es que cada litro de gasolina vendido en Venezuela se coloca a pérdida, así como cada barril que se envía a los socios del Alba. Y fíjate algo grave, Venezuela paga el flete a China, que es el comprador, cuando lo normal es que sea a la inversa.Shapiro estima que la nueva administración del presidente, Nicolas Maduro, no modificara el panorama en materia energética y piensa que Venezuela debería reconsiderarlo, pues el juego de los mercados es indetenible, así como la búsqueda de espacios en un sector que esta desarrollandose a pasos agigantados.-¿Venezuela puede perder mercado?En Estados Unidos es cierto que hay refinerías para crudos pesados, sobre todo en Houston y Lake Charles, pero también es cierto que Canada esta aumentando su producción en las arenas bituminosas de Alberta y que, cuando se termine de completar el oleoducto entre ambos países, se transportara un millón de barriles por día, que si mal no recuerdo es lo que envía Venezuela a los Estados Unidos.
Con eso no puedo decir mas, y quiero recordarte que no es el gobierno norteamericano el que hace negocios, sino empresas privadas, que son las mismas que envían la gasolina que esta comprando Venezuela.-¿En su opinión, qué debe hacerse en materia diplomatica entre ambas naciones, hay que nombrar embajadores?Siempre digo que mandar a un embajador de un país a otro no es un regalo, se requieren los mejores profesionales para fomentar la comunicación mutua en tiempos de crisis y dificultades.
Justamente, en esos casos es necesario que los dos países se entiendan muy bien, que hablen muy claro, es por eso que yo digo que Venezuela necesita un embajador en Washington y Washington necesita un embajador en Caracas para que no haya malos entendidos.
-¿Qué le dejó su paso por Venezuela?Muchos amigos y un gran cariño por el país. Pienso que es un lugar hermoso que tiene un potencial extraordinario para crecer y fijarse grandes metas, creíbles y posibles, pero para ello se requiere de voluntad política. A cada lugar que voy en los Estados Unidos y en cualquier parte del mundo encuentro a un venezolano y eso me llena de alegría y tristeza a la vez, pues pienso que grandes talentos estan emigrando de un país que los necesita.-¿Le gustaría volver?Me encantaría, pero no sé si me dejen entrar.
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