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Fallecida el pasado 26 de marzo, a los 84 años, la bailarina venezolana Sonia Sanoja, nació en Caracas en 1932, un día como hoy, 2 de abril. Desarrolló una sólida trayectoria en la danza contemporanea, disciplina que calificaba como 'una explosión de vida' y de la cual se erigió como pionera en el país.
Contaba 14 años cuando en 1946 comenzó a estudiar ballet clasico en el Club de Ballet del liceo 'Andrés Bello', lo que le sirvió de preludio para incorporarse posteriormente, en 1953, al Teatro de la Danza de Grishka Holguín, bailarín mexicano que dejó un sólido legado en Venezuela como docente de esa especialidad. Mas adelante estudió en Francia por varios años y a su regreso fundó la Compañía de Arte Coreografico Sonia Sanoja, que inició sus actividades en 1971.
Ademas de bailarina, Sanoja se graduó de licenciada en filosofía en la Universidad Central de Venezuela, carrera que le permitió cultivar profundas reflexiones sobre su arte, que dejó plasmadas en varios libros como Duraciones visuales (1963),
A través de la danza (1971) y Bajo el signo de la danza (1992), publicaciones que se convirtieron en textos indispensables para bailarines venezolanos y latinoamericanos.
La investigación en la danza contemporanea colmó de excelencia su arte, por lo cual recibió numerosos reconocimientos dentro y fuera de nuestro país. Se le distinguió por haber creado un lenguaje teñido de originalidad y autenticidad.
'La danza es el único dominio donde puedo expresarme', afirmó en una oportunidad.
Mientras estudiaba filosofía en la UCV conoció al eminente poeta Alfredo Silva, con quien estuvo casada hasta el fallecimiento de éste en 2009. En esa casa de estudios cultivó también amistad con intelectuales venezolanos de la estatura de Ida Gramcko, Oswaldo Trejo y Elizabeth Schí¶n, entre muchos otros.
En 1986 se retiró de la danza, pero gracias al coreógrafo Leyson Ponce regresó de nuevo en 2016 a través de 'Amor amargo', una versión coreografica del celebrado cuento de Rómulo Gallegos 'La hora menguada', en la cual compartió el escenario con Graciela Henríquez, su amiga de infancia. Las octogenarias exponentes de la danza se presentaron en la Sala La Viga del Centro Cultural Chacao.
'Este proyecto nace para comprobar que los bailarines no se marchitan a los 40 años. Sonia y yo ensayabamos en su casa. Se dio una relación de intimidad bellísima, porque esos límites entre danza y vida se desdibujaron. Encarnamos una parte del proceso histórico a través de dos cuerpos', refirió entonces Henríquez.
Al hablar de Sonia Sanoja, el crítico de danza Carlos Paolillo refiere que se trata del 'referente mas elevado que existe sobre la interpretación femenina de la coreografía en Venezuela'. También destaca que su vinculación con artistas plasticos la llevó a reinterpretar el arte desde la danza. 'Fue de las primeras en incursionar en el cuerpo escultórico, el cuerpo cinético en movimiento'.
La bailarina Zhandra Rodríguez afirma que Sanoja 'introdujo su propio lenguaje dentro de la danza contemporanea. Era única. Hacía sus propias creaciones y se apoyaba en los solos, en su interpretación del mundo y la naturaleza. Si no hubiera sido por ella, aquí no hubiese calado la danza contemporanea'... REGRESAR |
| Fecha publicada: 02/04/2017
Fuente: Informe21
Tema: cultura
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