El aumento de precios en el sector inmobiliario sigue indetenible. Tan sólo en el área de vivienda, la Cámara Inmobiliaria Metropolitana registró un aumento de 30% en el valor de las unidades comercializadas en el primer trimestre del año en comparación con el mismo período de 2006.
Dinorah Moreno, vicepresidenta de la institución y quien presentó las estadísticas en un foro sobre el sector organizado por la revista Gerente, informó que el precio unitario promedio del metro cuadrado entre julio y septiembre se ubicó en 2,4 millones de bolívares, siendo el máximo de 17,8 millones para aquellos ubicados en el municipio Baruta.
En buena medida, las presiones sobre el tipo de cambio han influenciado el nivel de precios. Moreno comentó que éstos tienden a recuperar su valor en dólares, pues desde 2002 no se cruzaban las líneas de devaluación y precios promedios.
Según el informe, de la cantidad de inmuebles que se transaron en el lapso en el área metropolitana de Caracas, 88% corresponde a apartamentos.
Sin embargo, el estudio da cuenta de una caída de 20% en el número de operaciones realizadas.
Mientras en el mismo período de 2006 se transaron 19.953 unidades, en esta oportunidad las colocadas se ubicaron en 15.792, lo que representa una disminución de 20,85%.
Moreno comentó que ello es consecuencia de una falta de oferta nueva que permita satisfacer la demanda, a lo que se suma que muchos propietarios hayan sacado a la venta inmuebles que normalmente estaban destinados al alquiler.
En el período se transaron 1,5 millones de metros cuadrados, mientras que en 2006 la cifra estuvo cercana a los dos millones.
De los municipios del área metropolitana, Libertador destaca como el que mayor número de operaciones concentró con 49%, aunque ello representa una ligera disminución respecto al mismo período de 2006 cuando se ubicó en 52%. Siguen Sucre con 26%, Baruta con 13%, Chacao con 10% y El Hatillo con 2%.
ALTÍSIMA INCERTIDUMBRE
Luis Emilio Vegas, presidente de la Cámara Inmobiliaria de Venezuela, advirtió que el mercado sufre las consecuencias de una gran presión y una altísima incertidumbre, lo que -aseguró- dificulta la orientación a los clientes, sean éstos vendedores o compradores en la labor de intermediación que ejerce el sector.
Advirtió que con medidas como la congelación de alquileres y la ley penal cambiaria, el Estado acorrala al sector y cierra las opciones para transar inmuebles de manera libre y abierta. REGRESAR |
