La política habitacional adoptada a partir de 1999, no ha dado los frutos anhelados.
La idea inicial era replicar la tasa de construcción de viviendas prometida durante el segundo mandato del ex presidente Rafael Caldera, cuando se ofreció establecer un canon regular de producción de unidades cercanas a las 100.000 anuales (98.000 al año, para ser específicos).
Estas pretensiones se han diluido a través de los últimos nueve años y aunque el Gobierno insiste en mantener en pie su promesa inicial, la realidad no apoya sus buenas intenciones.
Según el presidente de la Cámara Inmobiliaria Metropolitana (CIM) Luis Emilio Vega, durante el año 2007 fueron concluidas 86.000 nuevas soluciones habitacionales, lo que a simple vista se presentó como un segundo aire para el sector.
La cuestión es que durante los primeros cinco años del mandato de Chávez, la tasa de construcción se mantuvo atada a una cifra en descenso que sólo alcanzó en promedio, 20.000 inmuebles anuales.
De hecho, según datos del Conavi (Consejo Nacional de la Vivienda) y el Ministerio para la Vivienda, durante el período 1999 - 2005 se fabricaron sólo 110.000 viviendas.
En 2004 fueron construidas 12.000 unidades y en 2005, cuando se decretó la emergencia nacional en el sistema de vivienda, se logró purgar la producción, hasta llegar a 41.000 casas, pero no todas con sello del Gobierno central, pues la cifra fue apuntalada gracias a 11.000 construidas por gobernadores y alcaldes regionales; a estas se sumaron otras 9.500 del Ipasme, Pdvsa y la Corporación Venezolana de Guayana.
Por otra parte, el presidente de la CIM, asegura que de cara a las necesidades del mercado inmobiliario, la cantidad de viviendas necesarias es de 250.000, al año.
Todo esto deja muy mal parada a la cantidad de unidades presentadas durante los dos últimos períodos presidenciales.
Y LA COSA SE COMPLICÓ
En el año 2004 y debido a las grandes dificultades que presentaba el sector, el presidente de la República Hugo Chávez Frías, acordó la creación del ministerio para la Vivienda y el Hábitat.
Durante el mensaje emitido por Chávez, aquel 15 de agosto, desde la Asamblea Nacional, el primer mandatario reconoció que 'el problema de la vivienda azota, no solo a los más pobres, sino a las clases medias también (...) ese es un drama histórico de siglos, y no solo la vivienda individual, sino el hábitat, el mejoramiento de las condiciones de los barrios'.
A partir de ese momento, el Presidente señaló que la cuota anual de elaboración de unidades - aunque ésta no se cumpliera, ni por asomodebía ubicarse no en 100.000, sino duplicarse y llegar a 200.000 casa anuales.
Desde ese entonces, hasta ahora un total de cuatro ministros han dirigido el despacho para la vivienda (Julio Montes 2005, Luis Figueroa 2006, Ramón Carrizales 2007 y Jorge Pérez Prado 2008).
Sin embargo, ninguna gestión ha logrado dar con el clavo en la crisis de las casas: mientras el sector privado espera por el diálogo y las cuentas están en contra del Gobierno, ya que harían falta construir 114.000 casas para satisfacer las promesas.
Las nuevas familias, centenares de damnificados y el venezolano en condiciones de comprar una vivienda, esperan por un deseo que no se materializa. REGRESAR |