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La sequía se anuncia con desparpajo a lo largo de los parques del Este y del Oeste, donde los caraqueños de ambos extremos acuden a ejercitarse, relajarse y respirar entre los árboles. Los pulmones de la ciudad se muestran marrones en lugar de verdes como señal del ataque del sol y la falta de agua (tanto de lluvia como de riego). Al entrar al parque Alí Primera, en la avenida Sucre de Catia, resulta muy probable que se tope con estudiantes del Liceo Miguel Antonio Caro que funciona dentro de las instalaciones. Allí practican sus horas de educación física y premilitar, además de sentarse a jugar cartas y descansar.
Los jóvenes piden a coro un sistema de bebederos pues no hay ninguno instalado y mayor seguridad pues se quejan de que los han robado en reiteradas oportunidades.
La presencia de guardias en la entrada no garantiza la tranquilidad de los visitantes, que demandan vigilancia en toda la extensión y mejores sistemas de mantenimiento y riego.
'Las tortugas son las únicas que tienen agua ahorita. Ni las raras lluvias de estos días han dejado huellas en el parque. Da lástima que parezca un campo en el abandono. A pesar que se ven obreros que limpian, barren y están construyendo unos baños', comentó Elena Ortega, visitante cotidiana del lugar.
Por las tardes, se dictan clases de bailoterapia, taekwondo y hay un operativo permanente de cedulación.
La Alcaldía de Libertador junto con el Instituto Nacional de Parques (Inparques) firmaron un convenio para la recuperación de la infraestructura que incluye baños y caminerías.
Respeto e información
Al otro lado de la ciudad, palpita el Parque del Este con la llegada de usuarios desde poco antes que amanezca y hasta poco después del atardecer.
También la vegetación, aunque en menos medida que en el oeste, demanda un poco de humedad y limpieza.
Los trotadores que ya se conocen de tanto tropezar entre sí, requieren más información sobre los cambios que se hagan en las pistas, debido a las obras que ejecutan con el proyecto del Leander.
Manuel Lares, director de Administración en el área de Recreación de Inparques, informó que se delimitará un poco más la zona en donde se levanta el museo porque pronto se iniciarán las excavaciones.
'Queremos respeto para las instalaciones, mejores baños, demarcaciones de las caminerías, señalización y mayor vigilancia. Todos los días roban a alguien', dijo Catalina Salvatierra.
Laura Gabino piensa que deben revisar los ductos y mangueras. 'Se forman unos charcos y no llega el agua a su destino original', dijo.
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