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La construcción tiene más de tres años repuntando, pero su ritmo de crecimiento está cada vez más sujeto a la mayor inversión pública y al abastecimiento de insumos.
Cuando la actividad comenzó a mejorar en el año 2004 los fabricantes de materiales elevaron su capacidad, sin embargo la demanda de las obras del sector público y el sector privado ha generado presiones, con lo cual se ha creado un desfase que ha tenido como consecuencia la persistente falla en el suministro de algunos insumos.
Desde el año 2006, las dificultades con algunos materiales se han agudizado y han afectado la continuación y terminación de las grandes obras de infraestructura así como la realización de soluciones habitacionales.
Según la información que maneja la Cámara Venezolana de la Construcción (CVC), los principales problemas en abastecimiento se presentan con productos como agregados, materiales de arcilla, maquinarias y transporte de carga, a lo que se suman las fallas de logística con cemento.
En detalle
Uno de los argumentos dados por el Ejecutivo Nacional para nacionalizar a las empresas cementeras eran los problemas de suministro, sin embargo, las dificultades registradas en 2004 y 2005 se superaron. La producción el pasado año fue 7,4 millones de toneladas métricas y en el primer trimestre del año se ubicó en 1,7 millones de toneladas métricas. En el sector construcción se estima que la capacidad del sector está en 10 millones de toneladas, las limitaciones se encuentran con el transporte y los altos costos de los fletes.
Con cemento y agregados se produce concreto, y una de las dificultades que están enfrentando las concreteras es justamente el abastecimiento de piedra y arena.
Desde 2006 la situación con el suministro de agregados se ha agudizado, las empresas que los explotan llegaron a su máxima capacidad y no pueden ampliar o explorar otras zonas por los problemas con los permisos,.
La demanda de piedra y arena se encuentra en 12 millones de toneladas, mientras que la producción está en 10 millones de toneladas, y en el sector se estima que la capacidad de ampliación es de 1 millón de toneladas. En el caso de esos insumos se suma el factor de que, más allá de las obras, 40% se utiliza para la mezcla asfáltica.
A las dificultades con los agregados se añaden los problemas con el abastecimiento de productos de arcilla (bloques y tejas). El consumo de esos insumos supera los 2 millones de toneladas y la producción está por debajo, debido a que no se han realizado las inversiones para mejorar la tecnología.
En cuanto a las maquinarias y equipos, la organización destaca que entre 5.000 y 6.000 unidades están en condiciones de operatividad. Los representantes del sector señalan que se requieren de más unidades, por lo cual consideran que se tienen que invertir más de 500 millones de dólares en la adquisición de equipos. Sobre el transporte de carga, las dificultades se registran con la logística en especial con la vialidad.
Financiamientos
Más allá de los efectos que tiene la actividad con los insumos, el presidente de la Cámara Venezolana de la Construcción, Fernando Azpurua dice que uno de los aspectos que se pueden convertir en una limitante más adelante son los recursos, y en ese marco considera que se tienen que ampliar las fuentes de financiamiento de la actividad.
Las obras de infraestructura y de vivienda en parte se sustentan de la inversión pública, pero en el caso de la actividad privada la misma depende del crédito. La banca tiene que destinar 10% de su cartera a préstamos hipotecarios y de ese monto, 4% es lo que se está empleando para financiar los desarrollos habitacionales. Azpurua apunta que los fondos son insuficientes para atender los proyectos y aclara que a la banca no se le puede establecer una mayor cartera por las otras obligaciones que tiene, de manera que es necesario que se acelere la titularización de hipoteca. REGRESAR |
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