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Fedecámaras denunció ayer que la 'estrategia de aislamiento absoluto', emprendida por el Gobierno en la toma de decisiones, ajena a los actores económicos, lo acredita como responsable de los altos niveles de inflación.
José Manuel González, presidente de ese organismo empresarial, hizo un llamado al Ejecutivo para que incluya a los factores económicos, en una discusión conjunta dirigida a aminorar ese índice.
Comentó que el Gobierno ha deprimido al sector productivo, privilegiando las importaciones baratas. A la vuelta de estos meses, se ha comprobado que las importaciones no frenan la inflación, sólo a través del impulso a la producción interna.
La inflación acumulada en estos 9 años de gobierno y la proyectada para el cierre del año, en más de 30%, 'anula las mejoras salariales decretadas y constituye un impuesto corrosivo para la capacidad adquisitiva de la población', dijo.
'El evidente deterioro de nuestra economía, se aprecia cuando el bolívar fuerte antes de cumplir su primer año se habrá devaluado en más de 25%, es decir, habrá perdido una cuarta parte de su valor'. Precisó González que 'para diciembre un bolívar fuerte sólo valdrá algo cercano a 0,70 céntimos'.
El líder empresarial atribuyó el alza inflacionaria, que 'se le escapa de las manos al Gobierno', a 'políticas monetarias y fiscales equivocadas'.
'Lo primero que tiene que hacer el Gobierno es poner las cuentas en orden y demostrar que no se gasta más de lo que se recibe'. Y, al mismo tiempo, resultaría conveniente para el país que las autoridades convoquen al sector privado para analizar esa situación.
En el marco de su asamblea anual, Fedecámaras elaborará una propuesta al país sobre el combate de la inflación, que entregará al Ejecutivo. ml REGRESAR |
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