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Si tuviera ocasión de hacer un pronóstico frente a unos juegos olímpicos, en el que participe la misma delegación que asistió a Beijing 2008 (140 atletas), Eduardo Álvarez, presidente del Comité Olímpico de Venezuela, no dudaría en señalar las cinco medallas que anunció antes de acudir a la cita olímpica en China. Se basa para ello en información técnica, en la preparación de los atletas y en resultados obtenidos en diferentes competiciones. El pronóstico que hizo Álvarez sigue siendo objeto de duras críticas. Los medios de comunicación, que no vieron resultados en el podio de medallas, han pedido su renuncia. Había expectativas, es cierto, pero la gran pregunta era si obedecían a un golpe de suerte o tenían soporte en la preparación y en los resultados. Toda la información que llegó al COV fue debidamente validada y fue enviada por las distintas federaciones. No se puede hablar, entonces, de que se sembraron falsas expectativas.
Hay disciplinas, como el atletismo y el levantamiento de pesas, en las que hay que hacer una revisión tecnológica y metodológica. Pero también hubo resultados 'muy positivos' en canotaje, judo y natación.
¿Cómo se llegó al pronóstico de las cinco medallas?
Vas a unas olimpiadas con un atleta que ha ganado su cupo en clasificaciones y ha mantenido, a lo largo de un ciclo olímpico, resultados positivos. Inicialmente, en nuestros pronósticos manejamos 12 nombres y de ellos escogimos cinco con posibilidades de medallas. Silvio Fernández(esgrima)fueelprimerodelmundo, asistió a 35 válidas mundiales, a todos los eventos de ciclo olímpico (Panamericanos, Suramericanos, Centroamericanos y del Caribe, Bolivarianos) y a todas las competencias panamericanas e iberoamericanas de su especialidad y en cada una obtuvo un puntaje que lo ubicó primero en el mundo. ¿Si es así, cómo no vas a aspirar a una medalla? Otro nombre es Jonatan Suárez (prueba BMX de ciclismo). No es que era la primera vez que iba a unos juegos olímpicos. No. Jonatan Suárez es campeón mundial de bicicros ring 20 y le ganó, en dos oportunidades, a los 31 que estaban participando en los juegos. Si ese es su nivel técnico ¿cómo no vas a aspirar a una medalla? Había, además, tres atletas que ubicamos en ese nivel: Mayelis Caripa clasificó en el mundial de lucha y ganó medalla de bronce, no fue a un repechaje; si ella revalida su actuación también esperábamos medalla. Alonso Blanco, en Boxeo, fue subcampeón mundial en Chicago y se titula campeón en los Guantes de Oro en Tailandiayenunacompetenciaen Rusia. Por su nivel técnico, se perfilaba una medalla.
¿Los pronósticos se basan en resultados técnicos y los hace el Comité Olímpico Venezolano?
Por supuesto. Se hacen como parte de un análisis de cada uno de los deportes. Había otro grupo de atletas con quienes aspirábamos medallas: Adriana Carmona y Dalia Contreras (tae kwond do), Albert Subirá (natación) José Luis Fuentes (gimnasia) y Héctor Manzanilla (boxeo), con ellos sumamos 10 atletas. Además, había un equipo de conjunto, que era el sofbol. Aunque perdió con China y China Taipeig, derrotó a Japón, a Canadá; perdió con Estados Unidos y Australia. A la postre el equipo de Japón fue el campeón olímpico. Basado en ese análisis técnico, estoy señalando las posibilidades que tenía Venezuela.
¿En estos pronósticos no intervienen las federaciones, los atletas?
Los atletas nunca dicen que van a dar una medalla. Nosotros nos reunimos con las federaciones. Las federaciones realizan el análisis técnico de cada uno de sus atletas, la situación de cada uno de ellos a escala regional y continental.
¿Las federaciones suministran esa información al COV?
Ellos suministran esa información.
¿El COV la valida o las da como un hecho?
Esa información está completamente validado. Nosotros hacemos un seguimiento y control de lo que tiene que ver con resultados competitivos.
Nosotros tenemos un departamento técnico.
¿No se crearon falsas expectativas? ¿Quién incurrió en ese error?
Yo creo que por primera vez todos los medios de comunicación social, radioléctricos, escritos, digitales, incluso la mensajería de texto, y toda la población conocen a sus atletas. De eso me siento muy orgulloso. Se hicieron campañas como la del abanderado. Hicimos campa ñas de promoción de los atletas y visitamos todo el país. Hubo un interés en eso. ¿A eso se llama crear falsas expectativas? Creo que no. Hubo expectativas, al igual que en el mundial de beisbol, que al final nos trajo como tristeza y dolor, porque teníamos un equipo que pudo haber ganado. El pueblo venezolano es exigente en resultados y como pueblo somos bien duros. Nos gusta ganar. Somos ganadores. No nos gusta perder. Sí, se crearon expectativas, pero no falsas expectativas.
Esos mismos medios están pidiendo la renuncia de Eduardo Álvarez a la presidencia del COV. ¿Qué opinión tiene usted?
Hay cargos a los que no se puede renunciar. No se renuncia a ser Presidente, a ser diputado o gobernador, entre otras cosas, porque son cargos que elige la gente, al igual que la presidencia del Comité Olímpico de Venezuela. Quienes me pusieron aquí tendrán la posibilidad de sacarme o de ratificarme en el cargo. No se renuncia a cargos de elección directa.
Si tuviera que hacer un pronóstico, ¿qué diría?
El deporte nos enseña con las derrotas. Pero si me tocara pronosticar nuevamente diría cinco medallas. Sería irresponsable salir con una delegación del país, en la que se ha hecho una inversión, un esfuerzo, con la que hemos obtenido resultados competitivos y se ha hecho una preparación y tú decir: `vamos a ver si conseguimos una medalla como a la suerte'. Sería irresponsable ofrecerle al país una respuesta como esa.
¿Qué fue lo que ocurrió?
En la competencia perdimos. Silvio Fernández nunca pudo descifrar el combate con el húngaro (Gabor Boczko); Manzanilla ganó el primer round, el segundo, empató el tercero, pero se desesperó y perdimos el combate 13 a 9 con quien a la postre fue campeón olímpico.
¿No hubo fallas de manejo técnico?
Uno no puede tener fallas cuando tiene limitaciones técnicas. La delegación de Estados Unidos tiene 600 atletas y 100 acompañantes, pero fuera de eso, tiene un número similar de personas (700) que se dedican al manejo de la alta competencia. Siguen, uno por uno, cada deporte, los monitores, la parte biomecánica, evalúan lo que hicieron bien o mal y se reúnen con el entrenador de cada atleta para darle las orientaciones de la próxima competencia. Hay un equipo multidisciplinario metido en las ciencias aplicadas al deporte.
Ahí es dónde tenemos que profundizar. Quisiera tener un equipo similar, pero no soy gobierno, ni tengo recursos económicos para hacer eso.
¿Venezuela podría reunir a un grupo de personas con esa formación técnica? Me atrevería a decir que no. ¿O se trata de una impresión equivocada?
Hay que formarlas, evidentemente. Es una gran debilidad. Actualmente, tenemos firmados 31 convenios de cooperación. No lo podemos negar. El equipo de sofbol entrena en Canadá y los técnicos son canadienses. En atletismo uno de los entrenadores era norteamericano. En canotaje los entrenadores son cubanos y argentinos. En cada uno de los deportes, nuestros técnicos son extranjeros, firmados por convenios. En el caso de la gimnasia, el entrenador es ruso. En la gimnasia femenina es un brasileño y algo similar ocurre en voleibol, femenino y masculino. Es por eso que se creó la universidad del deporte. Pero apenas está por su tercer año. Por una parte tenemos que seguir profundizando en la preparación interna y por la otra en la contratación de técnicos extranjeros.
Todo eso refiere a una cantidad enorme de recursos. ¿El deporte debe apoyarse en la comercialización?
De los 204 países adscritos al Comité Olímpico Internacional, más del 60% recibe los recursos directamente del Estado. Y en más del 80%, el Comité Olímpico maneja la alta competencia. El Presidente acaba de anunciar la creación de una oficina en Pdvsa para el manejo de la alta competencia. Creo que está muy bien. Pero no sé si Pdvsa tiene los elementos suficientes como para manejar eso. Tendrá que ser una combinación entre el Estado, el Comité Olímpico y las federaciones para manejar una unidad de esa naturaleza, que guíe, forme, prepare y haga seguimiento.
Usted ha dicho que no se puede calificar de fracaso la participación de Venezuela en Beijing, pero también afirma que hay que aprender de las derrotas. ¿No es contradictorio eso?
Yo no he dicho que hay que aprender de las derrotas, yo dije que soy orgulloso en las derrotas y humilde en las victorias. Para nosotros, la participación en Beijing no se concretó en éxito en algunos resultados. Hay que evaluar, revisar y determinarlositemsquenocondujeronallogro de las cuatro medallas que nos faltaron para cumplir con el pronóstico.
¿A un deportista que clasifica en buena lid a las olimpiadas se le debe exigir que traiga una medalla? ¿O qué cabe esperar de su participación?
Lo que hacen los países con pocosrecursosesqueenvíanalos atletas que tienen posibilidades de traer medallas. Es algo bien discriminatorio. Lo que hacen los países que tienen recursos es que envían a todos sus atletas. Otros, como Venezuela, que trabajan para que haya una explosión del deporte y tiene recursos, envían a sus atletas que se ganaron sus puestos. El deporte tiene una tendencia hacia el Estado y eso hay que reconocerlo. La empresa privada invierte muy poco, no es comparable a lo que ocurre en Brasil o en Estados Unidos. En los últimos cinco años se ha quintuplicado el presupuesto de los 50 años anteriores. Eso hay que decirlo. Actualmente, tenemos 14 centros de ciencias aplicadas. No teníamos médicos especializados en deporte, médicos de equipo. Ahora los tenemos y paulatinamente estamos recuperando cosas que no se habían hecho en el país. REGRESAR |
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