La frase del título parece decirlo todo. Es la manera como la presidenta del Comité Paralímpico Venezolano (CPV), Ahiquel Hernández, define lo que fue la reciente actuación en los Juegos Paralímpicos de Pekín 2008. En efecto, el hecho de haber obtenido cuatro medallas puede ser catalogado como una salida del oscurantismo en el que estaban inmersos y un salto al reconocimiento del país, más aún tras el fracaso de los Juegos Olímpicos.
La dirigente no duda en calificar la participación en China como histórica. 'Fue una labor heroica la de nuestros atletas, porque nos permitió mostrar nuestras capacidades. Dejamos de ser invisibles. Ha sido sin duda, muy significativo. De 148 países que compitieron, Venezuela se ubicó en el puesto 46. Ellos le demostraron a todas las personas con discapacidad que sí se puede y aquí está la muestra', asegura.
Se emociona, con orgullo, cuando ve que el país también reconoce a atletas como Naomi Soazo, ganadora de la medalla de oro en judo. 'Es un justo premio y reconocimiento'. La primera medalla fue alcanzada por el judoca Reinaldo Carvallo en los 81 kilogramos en la categoría de deficiencia visual B3, abanderado de la delegación.
Uno de los hechos que resaltó fue la obtención de una medalla de oro para Venezuela por primera vez en la historia, gracias a Soazo en los 63 kilogramos. La tercera medalla para la delegación fue de Samuel Colmenares en los 400 metros de los atletas afectados en los miembros superiores, tras alcanzar un tiempo de 49,51 segundos. La última fue también para el atletismo en el relevo 4x100, integrado por Yoldani Silva, Ricardo Santana, Oduver Daza y Fernando Ferrer, en la prueba de los atletas con discapacidad visual.
LABOR DE AÑOS
A la hora de las reflexiones, Hernández cree que el éxito no ha sido un evento aislado, sino por el contrario, es producto de una labor de muchos años de esfuerzo con los atletas discapacitados. Hemos estado en estas tareas desde hace 25 años, con muchas personas trabajando, que yo denomino dirigentes anónimos.
Ha sido un periodo de duras luchas para hacer destacar el trabajo de los atletas con discapacidades'.
No duda en reconocer el esfuerzo del gobierno para contribuir al éxito. 'Desde 1999, hemos tenido un apoyo incondicional. El presidente (Hugo) Chávez nos ha brindado ayuda. Él ha dado un mensaje claro que ha permitido que el IND nos dé el apoyo que necesitamos'. En este sentido, enumera que los recursos se han traducido en varios renglones. El primero, ha sido la aportación de los implementos necesarios, como sillas de ruedas y bicicletas con tecnología de avanzada, los costos para la participación en los torneos del ciclo paralímpico y otros eventos internacionales, además del trabajo de concentración y base de altura que efectuaron en España, antes de viajar a Pekín.
Otro factor que enumera y que lo considera vital fue la coordinación existente entres las cuatro federaciones que componen el CPV, como lo son las de deportistas sobre sillas de rueda, de discapacidad intelectual, parálisis cerebral y discapacidad visual. Por último, resalta por supuesto la disposición de los atletas, que se resume en el empeño, sacrificio y compromiso que tuvieron en Pekín. Las cuatro medallas son el producto de una inversión que sin duda fue mucho menor que la empleada en los atletas convencionales para los Juegos Olímpicos. Hernández no habla de cifras pero asegura que fue muy importante ese aporte. Según dijo, el éxito no sólo se debe cuantificar basado en las cuatro preseas. Va más allá y revela números importantes. 'De los 27 atletas que llevamos a Pekín, 21 estuvieron entre los primeros ocho en cada una de sus competencias'. La cifra tiene más consideración al comprobarse que 24 de ellos estaban por primera vez en una olimpiada.
POTENCIA CONTINENTAL
Hernández considera que con esta actuación en Pekín, la tarea y las metas fijadas se cumplieron.
'El esfuerzo que se hizo valió la pena. Estamos entre las seis potencias del continente y superamos a países como Argentina y Colombia, que tienen un importante desarrollo en deportes con atletas discapacitados', señala. El futuro para los atletas discapacitados y su dirigencia está lleno de tareas por cumplir. Además de seguir mejorando para el próximo ciclo paralímpico, cuyo primer paso será el Parapanamericano juvenil a finales de año.
Según Hernández, la idea es fortificar a todos los atletas de alto rendimiento, quienes además de los 27 que estuvieron en Pekín se le suman otros 17 que están en el mismo escalafón.
Uno de los objetivos será la creación de una sede propia para el CPV. Para ello, están en contacto con la empresa privada, como Stanford Bank y otras instituciones. La dirigente aprovechó para mostrar su inconformidad por el hecho de que al programa Aló Presidente del pasado domingo sólo fueron invitados los atletas que obtuvieron medallas en Pekín. Según la dirigente, los demás participantes manifestaron su desacuerdo ante esta descortesía de considerar sólo a los ganadores. 'El IND no nos informó de ese acto, ya haremos el reclamo formal'. REGRESAR |