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El programa Táchira Bonito, que estuvo vigente por más de 8 años obligando a los funcionarios a barrer las calles de San Cristóbal durante los fines de semana, será eliminado una vez que César Pérez Vivas tome posesión del Palacio de Los Leones.
'Este programa se convirtió en un instrumento de persecución del gobierno, que humilló a secretarias y profesionales a los que obligaba a barrer las calles, vistiendo camisetas rojas. Esa es una tarea del municipio, hay que invertir en eso y generar empleo por esa vía', dijo el nuevo mandatario tachirense de 51 años de edad, que pasó 16 años como parlamentario y que será juramentado a las 11:00 am de hoy.
'Lo paradójico de todo esto es que el mandatario que oficializó el programa, Ronald Blanco La Cruz, nunca asistió, y lejos de embellecerse el ambiente, la ciudad se iba sumiendo en la espiral de la violencia y del sicariato, que la convertía, al caer la noche, en un pueblo fantasma', indicó Pérez Vivas.
-¿Hizo la oposición su tarea o ha podido hacer más?
-El del domingo fue un buen ejercicio porque logramos motivar mucho más a la población y avanzamos en zonas que geopolíticamente resultan clave para el país. Pero hemos podido ganar mucho más si las reglas y los métodos de definición hubiesen estado más claros. La falta de unidad y la ausencia de decisiones tempranas impidieron mejores resultados.
-¿Surgirán nuevos hechos violentos?
-Los tachirenses apostaron por un cambio porque soportaron la violencia durante ocho años sin respuesta efectiva. La agenda de la confrontación no es la nuestra.
-¿No teme usted ser una víctima de esta guerra de baja intensidad?
-Yo espero que los fantasmas del crimen sean disipados y reducidos a su mínima expresión.
-¿Cómo manejará un situado que se ve amenazado por la caída de los ingresos petroleros?
-El problema es que el Gobierno nacional está metido en un gasto público muy diverso y complejo. Tiene una agenda exterior muy ambiciosa que consume ingentes recursos: compra bonos de la deuda pública de países amigos, financia programas fuera del país y adquiere costosos equipos militares. Yo estoy convencido de que Venezuela puede salir adelante con ingresos modestos de 40 dólares por barril, pero debemos reconducir el gasto, salir de la visión estatista y promover la inversión privada.
Pérez Vivas tendrá un parlamento regional adverso. Contará sólo con 4 de 11 diputados en el Consejo Legislativo Regional. Para nadar en esas aguas turbulentas advierte que recurrirá a su arma favorita: el diálogo. 'Siempre he logrado acuerdos para resolver los conflictos', añadió.
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