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Fedecámaras estima que el Gobierno aplicará en las próximas semanas un plan de ajustes, que reoriente la conducción de la economía nacional, de cara a la crisis mundial y a la caída de los precios del crudo.
La Fundación de Estudios Económicos (Fundaeconomía), constituida y respaldada por las instancias superiores de ese organismo empresarial, elaboró un amplio documento en el cual asegura que esa recesión afectará el consumo energético y, por supuesto, el ingreso por exportaciones petroleras. En el caso venezolano, especifica, 'más de 90% de los ingresos por exportaciones totales provienen del petróleo y representan 60% de los ingresos fiscales'.
El informe advierte que 'la falta de inversiones en infraestructura física y humana en nuestra industria petrolera no permitirá compensar a corto plazo, con incremento de producción, la baja de los precios'. Al mismo tiempo indica que 'la falta de inversiones en el sector productivo interno, como consecuencia del acoso a que se ha sometido al sector empresarial y el deslave institucional que conforman las leyes y normas por el actual Gobierno, generan un entorno hostil para la reacción de la economía privada'.
Señala este órgano técnico -constituido para diseñar una base de datos actualizada de los indicadores de desempeño económico y social relativos a la producción y consumo de bienes y servicios- que en estos años 'se han dilapidado recursos por más de 820 mil millones de dólares y hoy la gestión presenta un déficit fiscal, menor producción petrolera y una enorme dependencia de las importaciones, especialmente de alimentos'.
La brecha fiscal para el primer semestre era de 7.024 millones de dólares, la balanza de pagos (corriente y de capital) presenta una contracción de 924 millones de dólares y el flujo de caja de Pdvsa para ese período registraba un faltante de 9.074 millones de dólares, sostiene Fundaeconomía, coordinada por Orlando Cabrera Eleizalde.
La entidad supone que 'compensar el impacto económico de las variables antes citadas con crédito externo y un riesgo país superior a 1.400 puntos, coloca a Venezuela en una situación de iliquidez importante y en el círculo vicioso de la devaluación, ajuste fiscal, inflación mayor a la reciente, escasez de bienes y empobrecimiento'.
A la 1, a las 2, a las 3
El documento sobre perspectivas económicas para 2009 ofrece tres escenarios posibles a los que el Gobierno pondría ejecución para enfrentar la crisis internacional: a) correr la arruga, b) realizar ajuste parcial sin cambio sustancial de las políticas y c) shock socialista. Estas eventuales opciones tienen en común la reducción del gasto interno y externo, la disminución de la liquidez y la sustitución de las importaciones de bienes suntuarios.
En la primera de las opciones, la de 'correr la arruga' o la de aplicar 'medidas implícitas encubiertas', se señala la 'restricción de divisas, dejando mayor volumen de importaciones al mercado permuta', la 'reducción de la actividad económica apuntando a un crecimiento de 1-2%' y la 'promoción de un incremento de la producción petrolera interna'.
La segunda opción, la del ajuste parcial, incluye además de las anteriores la 'liberación de las tasas de interés', el 'restablecimiento de impuestos como el ITF o IDB, y el aumento del IVA', 'aceptar recesión interna con crecimiento negativo de la economía' y 'aceptar la inflación superior a 50%'.
El tercero y último escenario, el shock socialista, impone una 'devaluación drástica de la moneda', la 'restricción de las importaciones solamente permitidas por al Gobierno', la 'restricción del gasto fiscal incrementando transferencias a sectores populares', 'asumir el control del sistema financiero y de las principales empresas privadas de bienes esenciales' e 'implantar definitivamente el socialismo del siglo XXI'.
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