Entre los objetos que se llevó un grupo integrado por aproximadamente 15 sujetos que irrumpió el viernes en la noche en la Sinagoga Tiferet Israel, ubicada en Maripérez, está la base de datos de los miembros de la comunidad judía que reside en Venezuela, Una comisión del Cicpc que dirige Douglas Rico, jefe de la Dirección de Delitos contra el Patrimonio Económico, y el jefe de la División contra Hurtos, Efrén Marín, estuvo ayer en esas instalaciones donde hablaron con los directivos de la sinagoga y de la Asociación Israelita de Venezuela y les pidieron un inventario de lo que se llevaron los antisociales.
Además prosiguieron con las experticias y activaron rastros dactilares en las diferentes dependencias. Confirmaron que los sujetos no se llevaron ningún objeto de valor.
Los investigadores analizan los testimonios de los dos vigilantes sometidos por el grupo delictivo para establecer qué tipo de personas profanaron el recinto e hicieron pintas en las paredes. Una fuente dijo que entre los investigados estarían policías.
Solidaridad. Los directivos de la sinagoga y de la Asociación Israelita de Venezuela recibieron ayer en la mañana a los embajadores de Alemania, Finlandia, República Checa, Canadá y Francia, así como al encargado de negocios de Estados Unidos, que expresaron su solidaridad personal y en nombre de sus gobiernos.
Abraham Levi, presidente de la Confederación de Federaciones Israelitas de Venezuela; Elías Farache, presidente de la Asociación de Israelitas de Venezuela, y el rabino Isaac Cohen, recibieron a los diplomáticos e hicieron un recorrido con ellos.
El embajador de Canadá, Perry J. Calderwood, dijo que esperaban que el Gobierno de Venezuela cumpla con su compromiso de castigar a los culpables del ataque. No quiso hacer comentarios sobre las declaraciones del Presidente.
Hadelin de La Tour, embajador de Francia, leyó una nota en la cual expresa su solidaridad porque la comunidad judía está afectada y recordó que la custodia de esos sitios es una característica de la democracia. Calificó el hecho como irresponsable y condenable 'que no va a destruir al paz y la convivencia en Venezuela'.
John Causeld, encargado de negocios de Estados Unidos, advirtió que no daría declaraciones políticas. Refirió que hechos como éste han ocurrido en su país y otras partes del mundo. Agregó que daba sus condolencias y solidaridad porque se trata de una violación de los derechos ciudadanos.
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