Rapidez y diligencia fueron las dos palabras utilizadas por Elías Farache, presidente de la Asociación Israelita de Venezuela, para describir las gestiones de las autoridades venezolanas en la investigación de los responsables del atentado de que fue objeto la sinagoga Tiferet Israel, en Caracas, el pasado 30 de enero.
El ingeniero agradeció la rapidez en los resultados y 'el interés y la vigilancia para eliminar los mensajes antisemitas'. No obstante, expresó preocupación por 'señalamientos gratuitos de varios sectores; que, por ejemplo, dijeron que esto podía ser un autoatentado'. Entre estas voces se encontrarían el portal web Aporrea y la comunicadora Hindu Anderi.
El ministro del Interior, Tareck el Aissami, reiteró la información que trascendió el domingo pasado. En total fueron detenidas 11 personas: 8 policías, 2 delincuentes y 1 vigilante, que estaban dirigidos por el escolta personal del rabino, que fue funcionario de la Policía Metropolitana y desempeñó el cargo hasta diciembre pasado.
Este último responde al nombre de Edgar Cordero y tenía a su cargo la seguridad personal del rabino Isaac Cohén.
'Era un muchacho que trabajó aquí. Y la verdad, no había nada que sospechar', indicó Farache, que conoció personalmente al escolta. Agregó que el trabajo hecho en el templo parecía de profesionales: 'Lo que más nos desagradó fue la profanación, independientemente del hurto'.
Según aseguró, el rabino Cohén se encontraba calmado.
'Él le da a todo una dimensión superior'. Al ser consultado sobre las declaraciones del presidente Hugo Chávez en el sentido de que su Gobierno no tiene una campaña en contra de los hebreos, Farache avaló esa afirmación: 'Yo no creo que sea antisemita'.
En relación con la confiabilidad de los resultados de las investigaciones policiales, el presidente de la Asociación Israelita no expresó dudas.
Aunque no han sido notificados oficialmente, aseveró: 'Para nosotros, este asunto está cerrado'.
En fuga. La subinspectora de la División Contra Homicidios del Cicpc, Yadira Torres, detenida por su presunta implicación en los hechos registrados en la sinagoga Tiferet Israel, se negó a colaborar con la pesquisa, así como a entregar evidencias que tenía en su poder.
Las pruebas fueron aportadas por uno de los funcionarios de la PM detenidos.
Torres sería pareja del cabo segundo de la PM, Francisco José Pérez Díaz, detenido por el mismo hecho. El Cicpc sigue pesquisando a la funcionaria porque estaría incursa en otros hechos.
El cabo segundo de la PM, Edgar Cordero, que era escolta del rabino Isaac Cohén, habría sido quien planificó el asalto a la sinagoga porque, presuntamente, quería vengarse de la comunidad judía en vista de que solicitó un préstamo para pagar abogados -porque estaría inmerso en un conflicto judicial- y se lo negaron. Preparó la incursión a la sinagoga con Pérez Díaz, al creer que allí había un plato de oro y 200.000 bolívares fuertes.
Falta aprehender a otros 7 sujetos, que están identificados y son del hampa común. Los 11 detenidos fueron localizados en allanamientos efectuados en la Cota 905, Lídice, Valles del Tuy y Catia.
El Aissami afirmó que existen elementos probatorios suficientes para solicitar la privación de libertad de otros involucrados. Los investigadores incautaron tres armas de fuego, un collar de perlas, la consola del equipo de circuito cerrado de televisión de la sinagoga y tres motos, dos de la PM y una particular. Los implicados habrían dicho que botaron al río Guaire los CD grabados. También habrían confesado que la consola la abandonaron en el 23 Enero para inculpar al colectivo La Piedrita.
Desde el inicio de la pesquisa, el vigilante de la sinagoga, Víctor Eduardo Escalona Lovera, despertó sospechas porque los asaltantes no lo encerraron, como hicieron con el otro custodio. El rastreo telefónico permitió establecer que el individuo hizo contacto con los autores del hecho.
Ayer el fiscal 41º nacional, Cristian Quijada, y su auxiliar Gustavo Li Chang, preparaban las actas de presentación en la sede del Cicpc de Parque Carabobo, para entregarlas en la tarde en la oficina de distribución del Palacio de Justicia. Los detenidos serán llevados hoy al tribunal asignado.
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