La decisión del gobierno de sustraerle a las regiones la administración de puertos y aeropuertos, carreteras y autopistas nacionales, como colocar una autoridad única para el Distrito Capital y diferir las elecciones municipales y de miembros de juntas parroquiales; es para Súmate una demostración contundente de que Venezuela está transitando el camino para la reducción del poder estadal y municipal, con el fin de concentrarlos en una sola persona. Para la asociación civil, es muy grave que en esta acción estén alineados el Tribunal Supremo de Justicia, la Fuerza Armada Nacional y la Asamblea Nacional, esta última al aprobar la reforma a la Ley de Descentralización, señala una nota de prensa.
Asegura que con la reforma a la Ley de Descentralización, el Parlamento desconoce lo establecido en el artículo 164 de la carta magna, cuya modificación fue rechazada por los venezolanos en el referéndum de la reforma constitucional el pasado 2 de diciembre de 2007.
'Debemos exigirles a todas las autoridades electas, de cualquier partido u orientación política, que defiendan las competencias y recursos de sus estados y municipios, como también respaldar las iniciativas que éstos realicen, independientemente de que hayamos votado a favor o en contra de ellos', prosigue el texto.
Súmate considera que centralizar los servicios atenta contra calidad de vida de comunidades y recordó que durante los últimos 20 años, uno de los principales avances políticos en el país ha sido la descentralización del poder público, que ha permitido a los venezolanos elegir a sus autoridades estadales y municipales.
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