Condenar la vuelta al centralismo y la criminalización política por igual. Éste fue el mensaje que dio ayer el gobernador del estado Zulia, Pablo Pérez, durante una rueda de prensa conjunta que contó con la presencia de gobernadores y alcaldes y de representantes de partidos de oposición.
El mandatario regional reiteró que el tema de la vuelta al centralismo no se refiere únicamente a puertos y aeropuertos, sino que implica el respeto a los mandatos constitucionales que consagran la descentralización.'El cumplimiento a la Constitución no tiene discusión o interpretación, no hay poder alguno por encima de ella', enfatizó.
Pérez anunció nuevamente las próximas acciones contra la reforma a la Ley de Descentralización de la oposición, como la concentración que se l levará a cabo el sábado en el estado Táchira en respaldo al gobernador de esa entidad, César Pérez Vivas.
Por otra parte, explicó que Eliseo Fermín, presidente del Consejo Legislativo del Zulia, se reunirá con el Consejo Nacional Electoral para discutir la posibilidad de convocar a un referendo en el estado sobre la reforma a la Ley de Descentralización.
'NO CONFUNDIR JUSTICIA CON POLÍTICA' Por otra parte, el gobernador del Zulia retomó el tema del juicio por supuesta corrupción al alcalde de Maracaibo, Manuel Rosales, para rechazar su persecución y la radicación del caso en Caracas. Aseguró que tanto el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) como el Ministerio Publico 'sólo buscan borrar del mapa político a Rosales'. Entre las irregularidades presentes en el proceso, Pérez denunció que la jueza a la que se le asignó 'por sorteo' el caso está emparentada con amistades de la presidenta de la Asamblea Nacional, Cilia Flores.
VIENE LA INTERNACIONAL SOCIALISTA
Por su parte, el secretario general de Acción Democrática (AD), Henry Ramos Allup, presentó los resultados de la reunión de la Internacional Socialista a principios de esta semana, en la que participaron Podemos, UNT, AD y el MAS.
Los oradores venezolanos en el encuentro fueron el diputado Ismael García, el dirigente del MAS, Felipe Mujica y el propio Ramos, quien denunció elementos como la vuelta al centralismo y la actitud militarista.
Por su parte, García explicó que participó en el gobierno de Chávez e incluso fue jefe de una de sus campañas, pero no podía avalar la violación de la Constitución y la intromisión militar.
La IS decidió enviar una delegación a Venezuela para estudiar las denuncias presentadas por los partidos. Respecto a la posibilidad de que el gobierno le niegue la entrada a tal delegación, Ramos aseguró que sería 'la mejor prueba de que nuestras denuncias son ciertas'. REGRESAR |