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| El pasado miércoles el Presidente de la República, como parte de las bondades administrativas anticrisis, le comunicó al país que AEROPOSTAL pasará a ser una empresa estatal, cuyo anuncio aclara el destino probable de la empresa de aviación comercial con más arraigo en el pueblo venezolano.Pudiera pensarse que si la acción penal que se le sigue a los hermanos Makled arroja sentencia condenatoria del supuesto delito de narcotráfico, sus bienes muebles e inmuebles pasarían a propiedad de la Nación según lo dispuesto en el artículo 66 de la Ley Orgánica sobre Sustancias Estupefacientes y Psicotrópicas, de tal forma que las acciones y por ende el patrimonio de la compañía Aeropostal Alas de Venezuela, sería patrimonio nacional. Las acciones La cuestión es, y probablemente mi Presidente no lo sabe, que en particular sobre la propiedad de esas acciones pesan acciones judiciales para dilucidar si realmente eran de los señores Makled o de sus titulares legítimos, Hayden de Ramiz y de Inversiones Giesbash C.A., quienes a su vez son los accionistas de 'Corporación Alas de Venezuela CA', única accionista de AEROPOSTAL hasta antes de la inscripción registral de una supuesta Acta de Asamblea donde los señores Makled adquirían el paquete accionario, cuyas acciones además se le habían dado en garantía al Instituto Venezolano de los Seguros Sociales, mediante una actuación judicial suscrita por el apoderado de las accionistas originales. ¿No es fácil, verdad?. También es importante señalar en esta historia que Nelson Ramiz, representante de las accionistas en varias oportunidades le notificó notarialmente al Registro V de Caracas, que las accionistas, no habían celebrado Asamblea alguna con cesión de acciones, que al parecer lo que firmaron fue una opción y sostiene Ramiz que los compradores no cumplieron las obligaciones ni pagaron el precio, sin embargo la Asamblea se inscribió. Ahora bien, como en el Registro Mercantil las acciones sí aparecen a nombre del ciudadano Basel Makled, por ello las medidas cautelares dictadas por el Juzgado Penal fácilmente surtieron sus efectos, sin embargo para la definitiva incautación debe resolverse primero el tema de la legítima titularidad de esas acciones para no perjudicar derechos de terceros, y en ese caso, si no hay vuelta atrás en la estatización de AEROPOSTAL, la nación debe indemnizar a los verdaderos dueños si estos demuestran tal propiedad. Las instalaciones Se entiende por vía de consecuencia que el propietario de las acciones de una compañía, por la ficción misma mercantil, se estima dueño de los bienes de esa empresa, de allí, que todos los activos, la marca o denominación, los mostradores aeroportuarios, talleres, hangares, equipos, instrumentos, etc., correrían la misma suerte que las acciones, pero todo dependerá del fallo judicial que dictamine si los señores Macled son culpables o no, y si estos son propietarios de las acciones y bienes de AEROPOSTAL. Los aviones Otro significativo activo supuestamente de la aerolínea que se pretende estatizar son las aeronaves, pero tales vehículos, esos DC9 McDonell Douglas no son propiedad de la compañía quien los operaba bajo concesión de otras corporaciones extranjeras que los vendieron a una empresa venezolana, mediante documentos autenticados en la Notaría Segunda del Municipio Baruta, mucho antes de la detención de los señores Makled, por lo que están excluidos de derecho de cualquier consecuencia contra los encausados, aun en el caso que resultaren culpables del delito que se les imputa. La Centralización descentralizada Indudablemente la intención presidencial es absolutamente cónsona con el estado de justicia social convenido en nuestra constitución, aunque soy de la opinión que no toda empresa marcha mejor en las manos del ejecutivo, las hay que por su naturaleza son compatibles con la función pública no obstante la genérica literatura del artículo 9 de la reciente reforma de la Ley Orgánica de Descentralización tan en boga en estos días y a la cual nos referiremos otro día. Sigamos volando en AEROPOSTAL y esperemos que el ordenamiento Jurídico decida. ✍ Marelys D'Arpino. [email protected] Www.marelysdarpino.com REGRESAR |
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