Sólo restan días para que finalice la Oferta Pública de Adquisición de los activos de la Cantv por parte del Gobierno Nacional y, aún cuando el Estado pasará a ser el socio mayoritario de la empresa, pareciera que el objetivo de control del 100% de la telefónica no será totalmente exitoso.
Los trabajadores-accionistas de la empresa amparados bajo la posesión de títulos clase C se han mantenido firmes en su lucha por encontrar mejores condiciones para la venta y, aún cuando su participación no es significativa y de que no tienen certeza del destino de la compañía en manos del Estado, han decidido, en su mayoría, asumir las consecuencias y quedarse como dueños de una Cantv que promete privar la rentabilidad social en vez de la comercial, que promete telefonía fija para todos y aumento total de la penetración de las telecomunicaciones a lo largo y ancho del territorio nacional, aun cuando la estrategia pudiera ser irreversible, afectar las operaciones de la empresa sino hay un plan de inversiones constantes y sacrificar los beneficios que hasta hoy ha otorgado la empresa a sus accionistas.
En el camino, los trabajadores accionistas han adelantado una demanda en contra de la OPA ante los tribunales locales que podría generarles un mayor alivio en el mediano plazo con relación a sus acciones y a una venta más acorde a la establecida hoy día por acción, a pesar de que en el corto plazo nada se podrá hacer, pues el cierre de la oferta termina el próximo martes.
En contraste, los accionistas clase A, entre ellos Telefónica de España y el Banco Mercantil, finalmente negociaron sus acciones con el Estado y, según Franco Silva, gerente General de Operaciones de Conatel, las empresas sólo esperan por el cierre de la Oferta para ceder sus acciones y recibir a cambio el pago acordado por cada acción.
En el caso de Telefónica, la compañía recibirá un poco más de 115 millones de dólares, mientras que el Banco Mercantil, a través de sus fondos de pensiones, recibirá un poco más de 778 mil dólares.
En Nueva York, los accionistas que decidieron firmar el documento de compromiso de venta de sus títulos al Estado, también esperan por el cierre de la OPA, que será el próximo martes, para así terminar su relación con la empresa, pues es seguro que el stock sea deslistado del NYSE en la capital financiera estadounidense una vez que el Estado asuma el control total de la Cantv.
Entre los más fuertes tenedores de acciones de Cantv en Nueva York, destacan Brandes Investment Partners con un 15% de las acciones clase D, Renaissance Technologies Corp con un 3% y Julios Baer Investments Management con un 4,87% de los títulos. El resto de las acciones clase D están repartidas entre diversos pequeños inversionistas.
En Venezuela, el movimiento ha sido escaso, tanto en la transformación de títulos como en la venta total de las acciones.Yelitza García, miembro de la junta directiva en representación de los trabajadores, dijo que el proceso de conversión no ha sido significativo y que pareciera que los accionistas prefirieron quedarse con sus títulos.
Señaló que durante la semana pasada se movieron un poco más de un millón de acciones en el mercado interno, que fueron vendidas entre los accionistas y la empresa, pero que ello no quiere decir que esas acciones se convirtieron en clase D. Durante esta semana, los poseedores de títulos clase C, tuvieron una especie de plazo para vender sus acciones o convertirlas en D, pero no hubo movimiento y es que en realidad, poco se ha sabido del movimiento total de la OPA, “pero en los últimos días comienza realmente a moverse la negociación por la cercanía del cierre de la Oferta”, comenta una fuente cercana a las negociaciones.
A partir de junio, el Estado comenzará una nueva etapa en Cantv, pero también iniciará un nuevo proceso de negociación con los empleados y accionistas trabajadores de la empresa, pues es seguro que las exigencias no pararán y que, por el contrario, se profundizarán los conflictos, sobre todo los relacionados con la contratación colectiva, pues es claro que la nueva Cantv pasará a formar parte del marco laboral estatal y que las reivindicaciones logradas hasta ahora, pasarán a un segundo plano. REGRESAR |
