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Quien sea asiduo oyente de La Mega habrá percibido el cambio: la emisora, juvenil y aparentemente despreocupada, se está tomando las cosas en serio. 'Mi equipo y yo sentimos como una nube negra desde que salió Diosdado hablando de una lista que nadie ha visto', acepta Karima Urdaneta, gerente de Producción de ese circuito.
Urdaneta reconoce que hay cierto nivel de angustia entre esa mayoría de jóvenes que trabajan en La Mega (unos 50 empleados). El impacto de lo sucedido con CMB y el resto de las emisoras cerradas no es poca cosa. Pero advierte que eso no ha afectado el desempeño: 'Me sorprende la capacidad y fuerza del equipo de producción'. Lo que sí está sucediendo es que, de manera lógica, los locutores transmiten al aire su preocupación: 'La situación les ha obligado a hablar de eso'.
Érika De La Vega no disimula su molestia: 'Lo que siento es rabia de vivir bajo esta amenaza', dice: 'Y es delicado porque esa rabia es fácil transmitirla por los micrófonos. Después del cierre de 34 emisoras es muy difícil pensar que eso, que es tan real, no va a seguir sucediendo, que no nos van a quitar otro poco de lo que tenemos'.
Alejandro Hernández trabaja como productor del espacio de César Miguel Rondón en Exitos. Y sigue siéndolo del programa que tenía María Isabel Párraga en CNB. Es decir, ya pasó por el primer golpe: 'El ambiente es de incertidumbre, lo que ocurrió fue muy abrupto y con ese antecedente nadie aquí puede pensar que algo así no volverá a pasar. Y me preocupa esto por el futuro del país'.
César Miguel Rondón, con sus 35 años en el medio, no se imaginó en este papel: 'Uno nunca ha sido cómodo, lo que nunca pensé es que uno pudiera terminar siendo tan letal. Yo les tiré dur´ísimo a Pérez, a Lusinchi y a Caldera. Pero la diferencia es que te enfrentabas a demócratas. Esta es una pelea muy desigual, enfrentarte a un régimen todopoderoso con un micrófono. Pero es la pelea que nos toca'. REGRESAR |
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