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Pese a que el Gobierno de Hugo Chávez se resiste a reconocer que el país atraviesa una crisis económica, ahora, vuelve a estar planteada la aplicación de nuevas medidas, según lo han señalado el mismo mandatario nacional y su ministro de Finanzas, Alí Rodríguez Araque.
Sin embargo, hay que recordar que en marzo de este año, y muy a duras penas, atinó a anunciar unas medidas económicas que resultaron ser más de lo mismo y no lograron los prometidos resultados.
Entre las nuevas disposiciones podrían citarse la devaluación de la moneda, la eliminación de los controles de cambio y precios, el incremento del precio de la gasolina y un verdadero estímulo a la inversión y a la producción, donde impere el Estado de Derecho y se garantice la seguridad jurídica.
Entre las medidas que se habrían presentado a Chávez este 15 de agosto, estarían:
Una política cambiaria basada en un tipo de cambio similar a 'Recadi', que dejaría: a) Una divisa a Bs.F 2,15 US$ para importaciones prioritarias como: alimentos e insumos para su producción, salud, bienes de capital, materia prima para la industria, y para viajeros. b) Se mantendría el mercado paralelo (dólar permuta) y c) Se establecería un sistema de subasta para satisfacer la demanda de otras importaciones no esenciales, a un precio intermedio en Bs.F 2,15 US$ y el dólar permuta.
Además, se contemplaría un impuesto a las operaciones cambiarias y emisión de nueva deuda bolívar-dólar a colocarse en el mercado interno de manera permanente. El problema con un cambio diferencial así planteado es que: no se sincera el verdadero valor de la divisa; no se crean normas transparentes y por añadidura se propiciaría un verdadero mercado negro.
La continuación de una política de financiamiento basada en el uso de las reservas internacionales de la República, mediante el traspaso al Fonden. Se fijaría a conveniencia un nuevo 'nivel óptimo' de reservas, el cual estaría por lo menos en US$ 10 millardos por debajo del actual.
Un supuesto plan de promoción de la producción interna. Algo que resulta risible de un Gobierno que está desmantelando el aparato productivo privado, para sustituirlo por un sistema 'socialista' con acentuado monopolio del Estado sobre los bienes de producción.
MEDIDAS MÁGICAS
Se estima que no habrán medidas mágicas para generar un equilibrio entre el dólar permuta y el oficial, debido a que haber permitido que el bolívar se reevaluara exageradamente produjo distorsión que ya está realizada. A la par de tal evaluación, mientras se represa la cotización oficial del dólar, la inflación sigue avanzando, allí el problema, pues no hay posibilidades de equilibrar sin producir efectos traumáticos.
La única vía que tiene el gobierno es flexibilizar la entrega de dólares oficiales, para que la presión sobre el 'permuta' baje, no sin antes deslizar la tasa, es decir, devaluar, de modo que la merma de reservas internacionales no sea muy fuerte y no se dispare la tasa 'permuta', en otras palabras, al Gabinete de Chávez está metido en un laberinto.
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