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Un grupo de ex rectores de la Universidad del Zulia expresó su rechazo a la Ley Orgánica de Educación, recién promulgada, por considerar que está viciada y que contraría lo establecido en la Constitución nacional sobre la autonomía que tienen las casas de estudios superiores en la definición de sus gobiernos internos, los proyectos curriculares y hasta el número de estudiantes que pueden incluir en sus matrículas.
Neuro Villalobos, máximo representante de LUZ durante 1996 y 2000, y vocero de los académicos, destacó que los profesores que han dirigido el alma máter más relevante del estado respaldan la opción de desconocer los planteamientos de la ley sobre la autonomía universitaria, por considerar que ellos violan la carta magna y la Ley de Universidades.
A su juicio, es necesario fomentar la tesis de que la Ley Orgánica de Educación es ineficaz, en el sentido de que el Gobierno no pueda violentar la autonomía que tienen los funcionarios electos en las casas de estudio para definir su funcionamiento interno.
'Las universidades determinan la estructura curricular, el contenido programático, incluso por ley, el número de matrículas que deben atender y no lo que imponga el Gobierno a través de un instrumento jurídico que es espurio. Es una ley viciada. Tenemos que atacar el vicio de esa ley', sostuvo Villalobos.
Explicó que el desconocimiento de la normativa promulgada hace un par de semanas debe concretarse 'no acatando cosas que correspondan a la autonomía universitaria'. Agregó que están conscientes de que toda la comunidad universitaria se va a oponer a la ley.
El ex rector indicó que el nuevo órgano legal que regirá la educación en Venezuela condiciona la autonomía; es decir, la capacidad de los administradores de cada universidad para definir sus propios reglamentos y organización, tal como está contemplado en el artículo 109 de la Constitución.
Coro de voces. Las declaraciones de los ex encargados de LUZ se suma al del actual rector, Jorge Palencia, quien la semana pasada criticó la forma 'clandestina' en que la Asamblea Nacional aprobó la ley y consideró que el Parlamento violó la carta magna al obviar la primera discusión de la normativa. También, afirmó que el texto legal cercena la autonomía financiera y académica de las universidades.
La semana pasada la vicerrectora académica, Judith Aular, calificó la ley de precipitada e inconsulta. Estimó que quebranta principios constitucionales y resta el papel protagónico de la familia en el marco de una educación más humanista.
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