Tengo que reconocer, con vergüenza, que es cuesta arriba que el Consejo Nacional Electoral se embarque en un proceso de derogatorio contra la Ley Orgánica de Educación, ni mucho menos el convencer a las personas para recolectar firmas que luego a través de una tazconada puedan ser utilizadas como apartheid político. Creo que ganará el bozal de arepa, muy a mi pesar, el venezolano común no está dispuesto a abandonar su convivencia particular y mezquina para aportar algo a favor del derogatorio.
Aunque el derogatorio tenga mejores condiciones, el miedo a no tener alguien que proteja al que se pronuncia hará una amenaza que permanezca en las cuerdas. Sin embargo, 'Dios concede el premio a la constancia', el Libertador Simón Bolívar.
Luis Barceló Briceño
C.I. 6.154.374
REGRESAR |