Anoche se eligió a la nueva Miss Venezuela. Y como no se podía declarar el concurso desierto, la banda y la corona se la dieron a Marelisa Gibson, quien representó al estado Miranda.
Miss Zulia, Adriana Vasini irá al Miss Mundo y Elizabeth Mosquera al Miss International, en un resultado anunciado, por cuanto eran de las favoritas. El cuadro lo completaron Miss Táchira, Mariángela Bonanni y Miss Amazonas, Jessica Guillén.
La velada, que comenzó a las 7 pm, transcurrió sin mayores problemas hasta que llegó la ronda de preguntas.
Patricia De Andrade, representante del Distrito Capital no pudo dominar los nervios y se enredó al dar la respuesta. Por más que Daniel Sarcos trató de ayudarla -recordándole parte de la letra del tema Perdóname, de Gilberto Santa Rosa- la pobre chica no pudo controlarse y hasta las lágrimas se le salieron, aun cuando su barra trató de animarla. Fue tanto su mal rato, que se desmayó y tuvo que ser atendida y no pudo salir para el final.
El 'suplicio' de la joven produjo una (mala) suerte de efecto dominó, el cual contagió, por lo menos, a la primera parte de las 10 finalistas. Hasta de Blackberrys y de 'face to face' se habló en la tarima.
Tradicionalmente, la ronda de preguntas suele dejar al descubierto que no importa cuántos profesores de oratoria y de autoestima tengan, la cultura, o mejor dicho la falta de ella, siempre es el talón de Aquiles de las misses. El tan celebrado profesor seguro que entró en shock al oír aquello.
De resto, el espectáculo de más de cuatro horas abundó en música, sobre todo reguetón (Franco & Oscarcito, Chino & Nacho, Tito El Bambino y Daddy Yankee) y en pocas misses. Este año, particularmente, no aparecieron mucho.
La presencia de Boris Izaguirre si bien no desmereció, tampoco aportó mayor cosa a la ceremonia. De hecho, muchos esperaban que fuese más irreverente -no al extremo que suele serlo- pero él se portó bien y se ciñó a la cartilla. REGRESAR |