El gobierno de Álvaro Uribe tiene identificados a 60 colaboradores directos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia en varios países del mundo, reveló el ministro de Defensa, Gabriel Silva.
'Sólo en Venezuela hay información de inteligencia sobre la presencia de unos 15 rebeldes de las FARC', aseguró el funcionario.
'Sabemos dónde están y en el pasado se lo hemos dicho al Gobierno venezolano, lo que pasa es que hoy en día no se puede decir nada porque la respuesta es un insulto, un ataque, una agresión, pero lo cierto es que ellos no están haciendo nada contra el terrorismo', dijo el ministro.
Sin embargo, reiteró que su país no tiene planes de efectuar en Venezuela una operación similar a la realizada en Ecuador el primero de marzo de 2008, que provocó la ruptura de relaciones entre Bogotá y Quito.
Ese día militares colombianos bombardearon un campamento de las FARC. En el ataque murió el número dos de la organización armada, Raúl Reyes, y otras 25 personas.
'La doctrina del Gobierno, que ha sido fijada por el presidente Uribe, es que estaremos denunciando pacientemente ante los organismos internacionales todas las veces que sean necesarias hasta que Venezuela responda por sus obligaciones', dijo Silva.
El alto funcionario agregó: 'Los países en los que fueron ubicados los colaboradores de las FARC adelantan labores de investigación. Esa es la diferencia con Venezuela. A pesar de las reiteradas denuncias, éstas no producen ningún efecto. Nadie puede evitar que un bandido utilice su territorio.
Lo importante es la actitud y la colaboración para capturarlo', subrayó.
Silva, por otra parte, no quiso referirse directamente a las acusaciones del vicepresidente venezolano, Ramón Carrizález, quien el jueves lo definió como un 'francotirador que está permanentemente agrediendo a Venezuela, haciendo afirmaciones y acusaciones infundadas'.
Explicó que no tiene interlocución con el vicepresidente venezolano, pero indicó que las muestras de agresividad las ha dado precisamente Caracas.
'Yo no le digo nada a Carrizález. Lo que es evidente es que no es Colombia la que tiene 5.000 millones de dólares en armas compradas para agredir, Colombia no insulta a otro país, Colombia no asesina 11 ciudadanos de otro país o expulsa a 500. ¿Quién es el agresor? Es un tema evidente como para tener que discutirlo', señaló.
Las relaciones entre los dos países atraviesan por una fase de gran tensión desde mediados de este año, a raíz del anuncio de un acuerdo mediante el cual militares estadounidenses pueden usar bases colombianas. Venezuela lo considera como una amenaza. REGRESAR |