El derrame petrolero que sufre actualmente el Lago de Maracaibo se ubica en un nivel “moderado”, según señalan las fuentes oficiales. Sin embargo, grupos ambientalistas y miembros del Consejo Legislativo del Estado Zulia (CLEZ), presentan opiniones contrarias
Eliseo Fermín, presidente del CLEZ, destacó que “si los organismos oficiales aseguran que contrataron alrededor de 2.100 personas para recoger petróleo, significa que el derrame es inmensamente grande”.
“Yo invito al ministro Ramírez para que junto al ministro Hitcher, vayan conmigo y yo les digo en qué playa se van a tirar, a ver si es verdad que se atreven a bañarse en esas playas para que digan que es moderado”, señaló el presidente del CLEZ, Eliseo Fermín.
Mientras tanto en el comunicado oficial, el Director Ejecutivo de Ambiente de PDVSA, Ramiro Ramírez, aseguró que “si se tratase de un derrame de grandes magnitudes, como lo ha querido mostrar la oposición y su guerra mediática, las orillas del Lago estarían totalmente cubiertas por una gran mancha negra”.
Por su parte, Alonzo Lijarez, miembro del grupo ambientalista, asegura que, moderado o no, lo cierto es que “el Lago de Maracaibo no puede sufrir este tipo de situaciones porque el impacto siempre es negativo”.
El ambientalista Lijarez también destaca que, debido a la corriente marítima, la mancha de petróleo ha llegado a las Costas del Lago y que la presencia del hidrocarburo disminuye el volumen de peces, situación que no sólo afecta a los pescadores, sino también a los animales que se alimentan de los peces puesto que pueden contaminarse y posteriormente morir.
Sabotaje contra irresponsabilidad
En cuanto al origen de la mancha, oficialmente se conoce que algunas líneas de suministro eléctrico fueron cortadas por “piratas” y que esto, aunado al desgaste en el que se encuentran las tuberías desde la “antigua Pdvsa”, fueron los detonantes para esta situación.
En contraposición, Eliseo Fermín, asegura que “no se trata de ningún sabotaje, de ningún corte eléctrico, ni es que no existía, como lo dijeron en alguna oportunidad, ni que no sabían dónde estaba el derrame; es simplemente una irresponsabilidad de las autoridades de Pdvsa que no se encuentra atendiendo los brotes”.
La acción ante el problema
Actualmente, la estatal previó mantener “bajo control” la situación, contratando pescadores para que iniciaran labores de “recolección manual de crudo”.
Sin embargo, Alonzo Lijarez (ambientalista) asegura que “la situación sigue igual, la tecnología manual empleada por los pescadores no es la más adecuada. Es un esfuerzo que no es suficiente para solventar la situación y los pescadores se ven obligados a hacerlo porque dependen de la actividad pesquera”.
Así también se ha podido conocer que quienes se dedican a la actividad pesquera y al mismo tiempo trabajan para recolectar manualmente las machas de crudo en el Lago, no se encuentran del todo satisfechos puesto que el pago que reciben se ubica por debajo de lo que obtienen en un día normal de pesca.
“Esta medida fue tomada para callar a los pescadores y evitar que trancaran el canal”, denunció Fermín añadiendo además que “los pescadores no tienen la pericia ni los equipos para recoger el petróleo en el Lago, contrataron a los pescadores para recoger el petróleo que llega a las orillas, pero donde están las lanchas, donde está el petróleo flotando no lo pueden recoger los pescadores”.
“Los responsables, ya sea Pdvsa u otro organismo, deben proveer las herramientas necesarias para solventar la situación, representantes del ministerio de Ambiente se hacen de la vista gorda y no hacen frente a o que está sucediendo”, afirmó Alonzo Lijarez.
“Pasaron de decir que no existía nada, que no había ningún plan de contingencia, como dijo el ministro Hitcher, para que luego el ministro Ramírez dijera que tiene 2000 personas contratadas, luego dijeron que era producto del sabotaje, luego que eran las empresas privadas que no querían colaborar y ahora dicen que es moderado. Hay demasiadas versiones en boca del gobierno y de PDVSA que tiene convertido el Lago de Maracaibo en un gran cochinero”, advirtió Eliseo Fermín.
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