El peso de las denuncias fue llevado durante dos años por el parlamentario Nelson Pineda, quien formó parte de la bancada oficialista del MVR, lo cual le valió su inhabilitación por las denuncias en contra de la corrupción de las redes de alimentos en la región así como del poder judicial.
La historia de alimentos podridos viene de vieja data en el estado Lara. En 2007 se registró la primera denuncia sobre comida podrida cuando en la población de Quíbor se descubrieron enterrados más de 100 kilogramos de pollo y carne descompuestos en el patio del "Supermercal" de La Ermita de esa población.
Más de 300 toneladas de alimentos en estado de descomposición han sido localizados solo en el municipio Jiménez entre los años 2007 y 2009, todos pertenecientes a la red Mercal y Pdval, situación denunciada en el Consejo Legislativo del estado Lara y la Disip, que tuvo como único resultado la destitución de la jefa de Mercal en Lara, Janeth Rodríguez.
El peso de las denuncias fue llevado durante esos años por el parlamentario Nelson Pineda, quien formó parte de la bancada oficialista del MVR, lo cual le valió su inhabilitación por las denuncias en contra de la corrupción de las redes de alimentos en la región así como del poder judicial.
Por eso a Pineda no le extraña la aparición de tanta comida podrida en esta entidad, situación que a su juicio se venía venir por el manejo inadecuado de las cadenas alimentarias oficialistas, las cuales llevaban años repartiendo comida descompuesta hasta dentro de los programas como el PAE y el Senifa (Servicio Autónomo Nacional de Protección a la Infancia y la Familia) lo que venía siendo denunciado por las comunidades educativas, consejos comunales y las propias madres del barrio.
Aún hoy en día las madres cuidadoras se quejan de la calidad de los productos entregados para alimentar a los niños, "los cuales pueden consistir hasta en verduras descompuestas y en leche vencida", dice Pineda.
Denuncias sobre este tipo de irregularidades existen en los municipios Morán, Crespo, Iribarren, Torres y Andrés Eloy Blanco.
En el estado Lara -sostiene- la seguridad alimentaria ha quedado en entredicho porque no solo se trata de alimentos dañados o vencidos sino que además los organismos dependientes del Gobierno "reparten esa comida dañada a la población y encima se molestan porque la gente denuncia".
"A ello se agrega -señala- la adulteración de las fechas de vencimiento así como de origen de los productos y el empaquetado en bolsas de marcas comerciales, como lo ocurrido en Buena Vista, en donde se descubrió ese grave delito, ya que según los mismos trabajadores le leche iba dirigida al Mercado de Mayoristas de Barquisimeto (Mercabar).
El 13 de julio de 2009, el dirigente social denuncia la presencia de más de 30 mil kilos de leche, cereales y granos vencidos, los cuales estaban siendo distribuidos por funcionarios de la Alcaldía de Jiménez, quienes al ser descubiertos señalaron que iban a ser enviados al centro de recría caprina, en donde serían procesados para consumo animal.
Aclara Pineda, que en Lara no existe procesadora de alimentos. "La única que conozco está en el estado Guárico".
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