El empresario de origen portugués Francisco Alves levantó hoy la huelga de hambre que inició el pasado fin de semana, después de que el Gobierno venezolano se comprometió a revocar la medida de expropiación de 2,7 hectáreas de un terreno industrial de su propiedad.
Alves, de 59 años, indicó que este miércoles se reunió en Caracas con el ministro venezolano de Tierras, Juan Carlos Loyo, al que explicó su caso y quien "al final tomó la decisión de revocar el decreto de rescate" de sus tierras, ubicadas en una zona industrial del estado central de Carabobo.
El "documento" de revocación de la medida de rescate emitida por el Instituto Nacional de Tierras (INTI) "me lo entregan esta tarde, esa es su promesa (de Loyo)" y "no tengo por qué" pensar que no la cumplirá, dijo el empresario.
"Ya no hay motivo para mantener la huelga de hambre" que inició el pasado sábado, añadió Alves, en entrevista telefónica con Efe.
Precisó que los contactos con el Gobierno del presidente venezolano, Hugo Chávez, comenzaron "anoche", cuando funcionarios del INTI lo visitaron en el galpón ubicado en su terreno donde se encadenó el sábado pasado.
El empresario, quien llegó a Venezuela hace 26 años y se dedica al procesamiento del acero, detalló que la reunión de este miércoles con Loyo tuvo lugar en un hotel del norte caraqueño, y que en la misma estuvieron presentes "representantes del consulado portugués" en Venezuela.
Señaló que conversó con el ministro venezolano sobre el tema de las "invasiones" a su terreno en los "últimos cuatro meses", y que imagina que el Ministerio de Tierras "va a tomar" cartas en el asunto.
Alves denunció que los presuntos invasores de sus tierras desvalijaron galpones, abrieron contenedores y destrozaron una zona con vegetación alta que mantenía como reserva forestal.
El empresario de origen portugués decidió iniciar la huelga de hambre el sábado pasado después de que el INTI le notificó de la apertura de un "proceso de rescate" de esos terrenos, "por circunstancias excepcionales de interés social o utilidad pública".
La decisión del INTI incluía "el ingreso del Instituto de Ferrocarriles del Estado al lote de terreno en cuestión, con motivo de llevar a cabo el Plan Nacional de Desarrollo Ferroviario que lleva adelante el Gobierno Nacional".
Las tierras, que Alves compró a lo largo de los últimos 21 años, "están cerca" de lo que será una estación de trenes que construye el Gobierno, "pero fuera de la zona de afectación" de esa obra pública, explicó el empresario a Efe.
En declaraciones a medios regionales el pasado lunes, Alves dijo que su protesta no era política, y que solo buscaba con ella "que se restituya la legalidad y se acabe la vagabundería de las mafias del Gobierno que se están repartiendo las mejores tierras del país".
"Esta es una situación ilegal, de delito (...) a los galpones de mi propiedad les quitaron los techos y las instalaciones eléctricas, el cableado y hasta saquearon un contenedor", afirmó el lunes pasado al diario regional El Carabobeño.
El empresario de origen portugués inició su protesta unos días después de la muerte del productor Franklin Brito, quien falleció la semana pasada a los 49 años en medio de una de las huelgas de hambre que realizó en rechazo a la supuesta expropiación de unas tierras de su propiedad.
El Gobierno de Chávez ha reiterado que las tierras de Franklin Brito nunca fueron objeto de expropiación y que sus reclamaciones fueron debidamente atendidas por las instituciones venezolanas, aunque "nunca" de una forma "satisfactoria" para él. REGRESAR |
