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El pleno del Senado del pasado 14 de septiembre se convirtió en el escenario de una dura confrontación dialéctica entre el ministro de Asuntos Exteriores, Miguel Angel Moratinos, y el senador del PP, Dionisio García Carnero. El punto de partida de este cruce de acusaciones fue la muerte del ciudadano Franklin Brito tras la huelga de hambre de seis meses que llevó a cabo en protesta por la expropiación de una pequeña explotación familiar. El senador popular calificó a Brito de referente ético y político para los más de 200 españoles afectados por esa misma situación. 'Usted mintió a los españoles. Estuvo en Caracas hace un año y dos meses y allí se comprometió ante más de cien de estos españoles a buscar una solución sin que hasta ahora haya hecho nada'. Estas acusaciones fueron respondidas por el ministro de Exteriores que utilizó los datos del embajador en Venezuela para explicar que el gobierno había estado trabajando desde el primer día. 'He recibido un escrito del embajador en Venezuela en el que me señala que ha habido nueve reuniones para identificar precisamente los 93 expedientes que quedan pendientes de solución. De esos 93 expedientes, 14 no se presentaron al Inti, 6 fueron descartados por razones legales, 28 deben completar la documentación exigida, 13 casos están vistos para indemnizar y 32 quedan pendientes de decidir si se les indemniza o se les otorga una carta agraria para continuar su explotación'. Los datos no dejaron satisfecho al senador del PP, quien anunció que trataría de impedir que casos como del Brito se reprodujesen en el futuro y tuviesen como protagonistas a ciudadanos españoles. 'Deplorable' El titular de Exteriores aseguró que había hecho todo lo posible para evitar la muerte del ciudadano venezolano y reconoció que profundamente su muerte. ' Es verdad que toda muerte es absolutamente deplorable. Desde luego, se hicieron todas las gestiones necesarias para evitarla. Pero hay que recordar que el señor Brito tuvo un pleito largo, difícil, con alegaciones jurídicas que fueron contestadas por las propias autoridades judiciales venezolanas y que concluyó con un desacuerdo en torno al monto del justiprecio y otras divergencias con las autoridades venezolanas'. Además, Moratinos explicó que en el Senado, que el fallecido había intentado interponer un recurso de amparo ante el Tribunal Supremo de Justicia Venezolano, aunque finalmente, este mismo tribunal lo declaró inadmisible, iniciándose a partir de ese momento la huelga de hambre que acabaría con su muerte el pasado 31 de agosto. El ministro de Exteriores también aprovechó su presencia en la Cámara Alta para responder a una pregunta del diputado del PNV, Iñaki Anasagasti, sobre las próximas elecciones en Venezuela y el ruego de que hubiese una delegación del Senado en las mismas. En este sentido, Miguel Ángel Moratinos confirmó la misma y aseguró que 'hemos conseguido que haya una representación que pueda observar las elecciones futuras que se celebrarán el 26 de septiembre, en Venezuela'. REGRESAR |
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