Nunca antes resultó tan apropiada la expresión 'el que hace la ley hace la trampa'. Así lo reflejan los resultados electorales del domingo, cuando el chavismo se alzó con el 60% de los cargos en disputa para la Asamblea Nacional pese a obtener el 48% de los votos.
Tal proporción es la consecuencia directa de la reforma a la Ley Orgánica de Procesos Electorales (Lope) aprobada por el chavismo en agosto de 2009, que acabó de un plumazo con el sistema de representación proporcional en el parlamento e instauró un modelo de sobre representación de las mayorías.
Así lo asegura José Enrique Molina, Profesor de Ciencia Política y Derecho Constitucional de la Universidad del Zulia, quien explica que gracias a esta maniobra el chavismo, pese a obtener sólo 100 mil votos por encima de la oposición (5.423.320 contra 5.320.364), conquistó 98 diputados contra 65 de la unidad democrática, una diferencia de 33 escaños.
Desde la introducción del sistema mixto electoral de representación proporcional en 1989 (que prevé la escogencia de diputados tanto por lista como en forma nominal) se estableció un mecanismo de descuento de cocientes para garantizar que el número de cargos obtenidos por una fuerza política correspondiera siempre al porcentaje de votos obtenido.
De acuerdo con este esquema, todos los cargos a elegir en una entidad debían distribuirse proporcionalmente entre las listas de los partidos de acuerdo a la votación obtenida. Luego, se le restaban a cada organización los diputados que se obtuvieran en forma nominal, para garantizar la proporcionalidad.
Hasta 1999 el sistema mixto se aplicaba bajo la fórmula 50-50 (mitad nominal y mitad por lista). En 2000, la Asamblea Constituyente aprobó el estatuto electoral que elevó la proporción a 6040 pero en ambos casos, la vinculación entre los votos lista y nominales, garantizaba la preservación de la proporcionalidad.
La reforma electoral del 2009, por el contrario, elevó el porcentaje de nominalidad a 70 y desvinculó los cargos circuitales de los obtenidos por lista. Esta es la razón por la que en estados como Carabobo, Mérida y el Distrito Capital, pese a alcanzar más votos que el PSUV, la oposición se quedó con menos diputados (ver gráfico).
De haberse mantenido la vinculación entre votos lista y nominales y aplicado el mecanismo de descuento (para garantizar la preservación de la proporcionalidad y evitar la sobre representación) el chavismo habría obtenido 13 diputados menos y quedado con una mayoría simple de solo 85 diputados.
Tal resultado le habría garantizado al PSUV el 51% de los cargos en disputa con el 48% de los votos.
Por su parte, la oposición se habría alzado con 76 curules, once más que las obtenidas conforme a la trampa oficialista y con el 48% de los votos se habría quedado con el 47% de los cargos. El PPT, hubieseobtenido cuatro diputados. REGRESAR |