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Son varios flancos abiertos: la Ley Habilitante, el nuevo Reglamento de Interior y Debates de la Asamblea Nacional, la Ley de Universidades. Pero el comunicólogo Marcelino Bisbal se centra en la tenaza que forman la Ley Orgánica de Telecomunicaciones (Lotel) con la Ley de Responsabilidad Social en Radio, Televisión y Medios Electrónicos. El diagnóstico es poco alentador....
-¿Cuáles son las implicaciones de la reforma de la Ley Resorte en los medios radioeléctricos y electrónicos?
-Cuando se carga todo el peso de la responsabilidad sobre los prestadores de servicio, en el caso de los contenidos de Internet, estos no tendrán más remedio que censurar ciertos y determinados contenidos. Y en el caso de la autocensura, los profesionales de los medios radioeléctricos tendrán la tendencia a proceder en consecuencia, por miedo a lo que les pueda pasar a los medios en donde ellos ejerzan. Por otro lado, está todo el tema de las sanciones que hacen que, para medios pequeños de las distintas regiones del país, las respectivas multas sean impagables. Este hecho actuará también como mecanismo de censura y autocensura. En síntesis, creo que se instaura de manera legal esos dos mecanismos perversos de la libertad de expresión como son la censura y la autocensura.
-¿Cómo actúa la Ley Resorte en combinación con la de Telecomunicaciones?
-Ambas están concatenadas. No se pueden analizar una sin la otra. Son el anverso y el reverso de una misma moneda, es decir, la restricción por vía legal del derecho a la información y la comunicación. En ambas leyes todo el peso de la ley, de manera bien restrictiva, se carga sobre los medios radio, televisión e Internet, del sector privado-comercial. Los medios del Estado, que deberían ser de servicio público, quedan exentos de muchas de las regulaciones que allí aparecen. ¿Por qué? Simplemente porque estamos frente a un Gobierno en funciones de Estado que no cree en la libre iniciativa, que es profundamente centralizador y controlador.
-¿Cuáles son los puntos álgidos de la Lotel?
-Son varios, pero destacaría uno que tiene que ver con el carácter de declarar a los medios de interés público. Por allí se nos cuela cualquier arbitrariedad del Gobierno a la hora de querer anular, intimidar o eliminar a cualquier medio (radio, televisión e Internet) por supuestas razones de interés público, según el criterio discrecional del Ejecutivo. Porque ya hemos visto cuáles son los argumentos del Gobierno para declarar de interés público empresas, tierras, edificios... las razones son más ideológicas que de otro carácter.
-¿Cómo serán la radio y la televisión con estas leyes?
-Ya teníamos una radio y televisión bastante neutralizadas por diversos mecanismos que van desde la armazón jurídica impuesta hasta el tema de los impuestos y la publicidad oficial. Con estas dos reformas, y las que puedan aparecer en el tiempo hasta 2012, se completa aún más la intimidación, el miedo y la neutralización de esos dos medios. Los dueños de los medios se cuidarán todavía más para no ser sancionados y que no se les cierre el medio, y los profesionales de la comunicación otro tanto. En síntesis, tendremos una radio y televisión que querrá jugar a eso que llaman el 'equilibrio informativo' a costa de ofrecer la realidad de lo que esté pasando.
-¿Controlarán Internet realmente?
-Es difícil, por ser este un medio muy 'flexible' y 'escurridizo'. Pero allí está la prohibición-regulación y con un Gobierno como el que tenemos cualquier barbaridad es factible. Lo hemos visto ya en otros ámbitos de la vida del país.
-¿Cuál es la intención del Estado con estas leyes, en materia informativa?
-No me cabe la menor duda: controlar a la sociedad venezolana. Que piense como el Gobierno quiere que se piense, que actúe como él quiere, que se vista como al proceso se le antoje... Es un Gobierno controlador por excelencia y para ello debe limitar lo más posible, hasta cerrar la válvula de la expresión, la información-opinión-pensamiento.
-¿Cerrarán Globovisión?
-Pues a esta altura de la vida del país no lo sé. No me atrevo a afirmar ni a negar. Pero los mecanismos jurídicos están ya establecidos. ¿Pasará esa raya tal como lo hizo con RCTV? Ganas le tiene y el propio Ejecutivo lo ha expresado.
-¿Cómo queda la libertad de expresión e información con estas leyes?
-Muy golpeada y maltrecha. De seguir como vamos y quedarnos quietos, sorprendidos, con miedo... los que perdemos no son los medios ni los periodistas -que también pierden-, sino la sociedad en general. No tendremos la posibilidad de expresar libremente, no tendrán la posibilidad de hacerlo por nosotros. Porque la libertad de expresión, la libertad de comunicación, el derecho a la información y la comunicación, es un derecho total que abarca los demás derechos. Si lo perdemos ¿qué pasa?
-¿Puede hacer algo el ciudadano a estas alturas?
-Mucho. Lo que no puede ni debe hacer es quedarse en casa, inmovilizarse. El hacerlo hablará muy mal de nosotros. Si la sociedad le permite esto a Hugo Chávez Frías y a sus incondicionales, estaremos en presencia de una sociedad y de un país 'dominado', 'controlado'. Entonces como decía Umberto Eco: ¿Por qué tomársela con estos hombres y no con la sociedad que les ha dado carta blanca?
-¿Qué falta por controlar?
-Luego vendrán por los medios impresos y más tarde por nuestras propias vidas y en definitiva por nuestra misma existencia como sociedad y país democrático. Pero hasta allí no llegaremos. Veremos qué pasa a partir de enero y los meses que restan hasta el 2012. Esperemos que el Gobierno haya medido bien pues no se puede jugar y 'estirar' tanto a la sociedad. No se puede ser tan bárbaro. REGRESAR |
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