No creemos que lo sea... Allí lo que hay es una malacrianza inducida por factores golpistas torpes, quienes han tenido éxito en esa aventura porque se trata de un pequeño grupo de juventud que no sabe qué cosas son la patria y el sacrificio de servirla hasta entregar la propia vida, si fuese necesario, para defender su integridad y soberanía.
Ciertamente es un grupo reducido, socialmente identificado con valores ajenos a nuestra cultura y a nuestras raíces. Sueña con el american way of life y para ello vive. Lo ha tenido todo y de sobra. Para sí y para sus progenitores lo prioritario es resguardar sus propios intereses, sin importarle un bledo el pueblo que de verdad trabaja con inmensos sacrificios para ganarse el pan de todos los días, a quien lo califican de lumpen, de pata en el suelo...
Se estimula salir a marchar, dizque en paz, nada más que para preservar su status quo y una buena muestra de ello es esta conversación bien expresiva por su contenido egoísta y bien malsano de Carlos Granier con su madre: "mami, vengo de quemar las calles. Esta es nuestra última oportunidad, mis negocios van mal, he perdido mis dos mejores clientes, Radio Caracas Televisión y CANTV, de manera que si esto fracasa, me voy del país".
Pero su mayor malcriadez la tuvo cuando desdeñó la extraordinaria oportunidad que se le brindó de dirigirse desde la Asamblea al pueblo en cadena nacional para explicarle y razonarle las causas de sus luchas por la "libertad" y los "derechos civiles". Que la Asamblea es rojita, rojita y que por ello no valía la pena hacerlo, es una explicación sin sentido que ahora da para intentar diluir lo que no fue otra cosa sino una decisión bien estúpida.
¿Debatirán estos jóvenes después de tamaña torta? Tal vez lo hagan otros y ojalá que así sea, aquellos que de buena fe adversan al Gobierno, pero que muy seguramente tengan mucho que decir en la tarea de construir una patria libre, donde prime la justicia y la igualdad de oportunidades para todos los venezolanos. REGRESAR |
