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El anuncio del presidente Chávez sobre la inauguración del viaducto que une a Caracas y La Guaira para esta semana funcionó como un ultimátum a los trabajadores quienes agilizan los detalles finales de la obra. Se espera la fiesta de apertura para el próximo jueves 21.
Las máquinas traqueteaban ayer para culminar la construcción de la junta de dilatación, es decir, e´l sitio exacto donde se une el estribo Caracas del puente con la autopista.
Un grupo de obreros esperaba al mediodía la llegada de esmeriles para pasarlos por las defensas del puente.
Sobre el asfalto del canal que parte de La Guaira se observaba una línea de puntos blancos que deberán convertirse, lo antes posible, en el rayado que delimite la vía.
Entre las tareas que le quedan a las empresas contratadas por el Ministerio del Poder Popular para la Infraestructura (Minfra) figura el asfaltado de la pista en sentido Caracas-La Guaira con el empalme.
Ante el trabajo agotador y continuo que ha significado la construcción del puente, los obreros ansían ver al proyecto ejecutado y funcionando.
"La cosa es el jueves con seguridad. Habrá fiesta y vendrá el Presidente a probar cómo quedó todo. Hay mucha emoción y también cansancio. La gente quiere cruzar mucho más rápido", comentó un trabajador con entusiasmo casi infantil.
Información a tiempo
El Fondo Nacional del Transporte Urbano (Fontur) se encarga de la colocación de avisos preventivos e informativos en las zonas cercanas.
Los carteles indican la utilización obligatoria del canal derecho a los conductores de carga pesada, quienes deben circular a 60 kilómetros por hora y la reducción de velocidad a 80 kilómetros por hora a quienes manejen vehículos livianos.
Los funcionarios del Fondo también dispondrán cuatro señales de retorno. Hacia Vargas habrá un aviso anunciando la cercanía del aeropuerto, Catia La Mar y La Guaira.
Llegando a Caracas se informa sobre la proximidad de la avenida Sucre, Coche y Petare, mientras otro cartel prohíbe que los vehículos se estacionen en el viaducto.
Hay un punto donde se junta el puente con la autopista en dirección a la capital y también se conecta la vía de contingencia. "Puede generar confusiones, no sé si van a colocar un semáforo o luces de emergencia. Quedan preguntas por responder", expresó Juan Marcos Pineda, que soportó ayer dos horas de cola en las cercanías.
Una cuadrilla de obreros se encarga de desmalezar las zonas verdes cercanas a la vialidad en el sentido Caracas y otro grupo de trabajadores cambia de lugar, poco a poco, las defensas móviles amarillas y blancas que desviaban el tráfico hacia la trocha.
Las trancas no han dejado de producirse y los vendedores ambulantes afirman que continuarán sus actividades hasta que corten la cinta que dé acceso al nuevo puente.
"Nos dijeron que hasta el miércoles podemos circular. Estamos en la búsqueda de nuevos sitios donde se formen colas largas, como aquí", dijo Luis Perozo, cuya oferta para los conductores, ayer, se componía de ejemplares de Guaky, la mascota oficial de la Copa América. REGRESAR |
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