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El grupo de exdiplomaticos venezolanos que este miércoles manifestaron su respaldo a la candidatura de Henrique Capriles Radonski, 'son personajes sin ninguna credibilidad', expresó el embajador de Venezuela ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Roy Chaderton. 'Aquí hay reposeros, aquí hay pillos, aquí hay gente que se robaba los gastos de funcionamiento, pagaba sus gastos personales con dinero del Estado', señaló Chaderton en relación a los 118 exfuncionarios que ademas arremetieron contra el Consejo Nacional Electoral (CNE), el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) y el Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (Saime).Agregó que 'es muy difícil generalizar pero lo que me asombra es que gente decente, que tiene todo el derecho a ser disidente de este gobierno, estén mezclados en la propia mesa con bandidos, con incompetentes y con tarados profesionales'. La vocería de este grupo la asumió José Geron Revanales, exdirector general de Economía y Cooperación Internacional del Ministerio de Relaciones Exteriores, un exfuncionario que firmó el decreto de Carmona Estanga en abril de 2002 tras el golpe de Estado contra el presidente Hugo Chavez, donde se abolieron los poderes públicos del Estado venezolano. Chaderton expresó su sorpresa por la presencia de los excancilleres Humberto Calderón y Fernando Ochoa entre estos exfuncionarios. 'Me aterra ver a dos excancilleres, liderizados por un matón, un funcionario de carrera llamado Gerson Revanales, que a parte de ser un firmante en apoyo a Carmona -ya eso en sí es una joya diplomatica- este señor tomó por asalto el 12 de abril de 2002 el despacho del (entonces) canciller (Luis Alfonso) Davila y agredió a su secretaria'. Entre los firmantes del pronunciamiento también se encuentra Diego Arria, exembajador ante las Naciones Unidas, a quien calificó como 'el padre de la corrupción moderna en Venezuela' porque cuando 'él llegó al ejercicio del poder, hace ya mas de 30 años, los negocios en Venezuela pasaron a ser en serio y en dólares'. Precisó que Arria también 'es un personaje que pretendió llevar a la Corte Penal Internacional al presidente Chavez'. 'Aquí hay otro que fue embajador en Buenos Aires el día del golpe (2002) le dio declaraciones al diario La Nación de Argentina y pusilanime cual es, pasadas 47 horas, regresó a la revolución con la vuelta de Hugo Chavez', dijo Chaderton en alusión al exembajador de Caracas en Buenos Aires Edmundo Gonzalez Urrutia.
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