Desde que se inició el proceso de transición de Sidor de manos del consorcio Ternium al Estado venezolano, la empresa ha dejado de percibir cerca de 18 millones de dólares mensuales y la producción de acero líquido ha caído en 108.000 toneladas.
Estas cifras no salen de un sombrero de la oposición.
Las manejan los 15.000 accionistas clase 'B' que tienen 20% de las acciones de la empresa; Ternium, que aspira a 10% y por supuesto, la Comisión de Transición, integrada por los ministros Rodolfo Sanz (Mibam), Roberto Hernández ( Trabajo), William Contreras y José Gregorio Montilla Pantoja, designada por el Jefe del Estado, el pasado 16 de junio de este año, según Gaceta Oficial 38.953 Pedro Acuña, máximo representante de los accionistas clase 'B', es sin embargo optimista. 'Poco a poco el Gobierno se da cuenta que manejó de forma un poco timorata la transición de Ternium Sidor y ha ido recomponiendo las cosas', dijo.
El sólo hecho de haber destituido a Iván Hernández, viceministro de Minas y miembro de la Junta de Transición, agregó, y de haber ubicado nuevamente a la directiva del sindicato fuera de las líneas de comando en la empresa, ha hecho que se recupere el orden. Afirmó que con esta gente en la dirección de Sidor, cuando pasó de manos del consorcio italo argentino a manos del Estado venezolano, comenzó la improvisación, la discriminación y por supuesto, la anarquía.
'De allí las cifras de caída en productividad y producción, que no de ingresos, porque hasta suerte tenemos puesto que en estos momentos la tonelada de acero se cotiza en el mercado internacional en 1.260 dólares', advirtió.
Acuña trabajó 22 años en Sidor. Ingresó como ingeniero de entrenamiento y salió como gerente de Servicios Industriales. Ahora es el vocero de los accionistas clase 'B'.
Cree que con la designación de Miguel Álvarez como director general y Jesús Ramírez como director industrial -conocedores de la empresa y vinculados al sector siderúrgico- el Estado quiere o alguien en el Gobierno intenta hacer las cosas bien.
Discriminación.
El dirigente sostuvo que hay discriminación de parte de los diferentes grupos políticos y del sindicato (Sutiss), todos vinculados de una forma u otra con el oficialismo, que se han dedicado a perseguir a jóvenes profesionales -a los que se llama JP- formados para ser líderes de proceso. 'Hay cerca de 170 profesionales, venezolanos, formados en planta, bajados de cargo, y a quienes se les ha querido aplicar medidas de despido indirecto'.
Agregó: 'Ya han renunciado 22 y se los lleva México, Argentina y Brasil, porque aquí los sindicalistas los acusaban de patronales, imperialistas y argentinizados. Su único delito era ser eficientes, responsables, tener control y disciplina, y buscar el mejor rendimiento en Sidor. Ellos dentro del organigrama de funcionamiento de Ternium pasaban a ser profesionales jóvenes'.
Acuña, le hace un llamado a esos 170 jóvenes profesionales ingenieros para que acudan a la sede del Colegio de Ingenieros de Venezuela, en Ciudad Guayana, para buscar solución a la situación. REGRESAR |
