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| El juez en lo Penal Económico Daniel Petrone le pidió informes a la Cancillería por cinco exhortos enviados a Venezuela y no respondidos por ese país en el marco de la investigación por la valija repleta de dólares que el empresario Guido Alejandro Antonini Wilson quiso ingresar al país en 2007. El escándalo cumplirá mañana dos años y lejos está de ser esclarecido y sancionado. En Tribunales le echan gran parte de la culpa a la falta de colaboración venezolana y en Cancillería dicen que hicieron todo lo que la Justicia pidió. Los exhortos están vinculados con el registro de entradas y salidas de Venezuela de Antonini, si declaró equipaje cuando llegó a Caracas procedente de los Estados Unidos antes de venir a Buenos Aires, si hay filmaciones del aeropuerto caraqueño y si hay registradas operaciones comerciales del empresario en su país natal. Nada de eso fue respondido por Venezuela. Aquí comenzó a investigarse qué vínculos tiene Antonini con dos empresas locales con las que se habría contactado telefónicamente. Pero, lo más importante, el juez aguarda de Venezuela un peritaje contable de la empresa estatal Petróleos de Venezuela Sociedad Anónima (PDVSA), las detenciones y extradiciones del ex vicepresidente de esa firma Diego Uzcátegui y su hijo, Daniel Uzcátegui, y las declaraciones testimoniales de los otros pasajeros venezolanos del taxi aéreo que trajo a los acusados junto a dos funcionarios argentinos. Antonini quiso ingresar sin declarar al país, en la madrugada del 4 de agosto de 2007, casi 800 mil dólares que fueron descubiertos por la ex policía aeroportuaria María del Luján Telpuk, ahora modelo. El vuelo había sido fletado por el Gobierno argentino con el titular de la empresa petrolera estatal Enarsa, Exequiel Espinosa, y el ex titular del Órgano de Control de Concesiones Viales (OCCOVI) Claudio Uberti, quien perdió su cargo por este escándalo. Cancillería recibió el viernes pasado el oficio en el que Petrone pide 'un informe para determinar el estado actual de las cinco rogatorias' enviadas a Venezuela por el escándalo de la valija. El Palacio San Martín le responderá hoy y le dirá que tramitó a tiempo todos los pedidos. Voceros de la Cancillería dijeron que el ministerio conducido por Jorge Taiana 'siempre' prestó la 'máxima colaboración' a Petrone, 'como se hace con todos los jueces', aclararon. La demora venezolana En Cancillería trataron de bajarle el tono al asunto y sostuvieron que pedidos de este tipo son rutinarios en la relación entre los jueces y el Palacio San Martín. Pero en Tribunales sostuvieron que se precisa 'presión diplomática' para que avance la cuestión, aunque el oficio enviado al ministerio con la firma del juez no incluya esas exactas palabras. Una fuente del Palacio San Martín sostuvo que el 10 de setiembre del año pasado funcionarios de la Embajada argentina en Caracas le plantearon este tema a los responsables del área jurídica de la Cancillería venezolana y enfatizaron que la Argentina, en contraposición, había contestado todos los pedidos llegados desde el país gobernado por Hugo Chávez. El primero de los exhortos es casi tan viejo como el inicio de la causa, o sea que también va a cumplir próximamente dos años. La demora venezolana motivó incluso que el juez rechazara la última colaboración pedida por Venezuela para la causa abierta en Caracas y les dijera que no enviaría nada de lo solicitado mientras no se respondieran las viejas solicitudes argentinas. Los venezolanos querían que viajaran para declarar allá Telpuk, Uberti y la ex secretaria de éste, Victoria Bereziuk. En el mismo oficio llegado el viernes a la Cancillería, el juez Petrone también pidió un informe sobre el 'estado actual' de los exhortos enviados a los Estados Unidos por la situación del propio Antonini, con un pedido de captura internacional vigente pero aún no llevada a cabo en ese país. Además, Petrone aguarda de las autoridades norteamericanas el envío de los audios de las grabaciones que el propio Antonini, con la asistencia del FBI, les hizo a supuestos agentes de inteligencia venezolanos que querían convencerlo de no revelar el motivo de su escandaloso viaje a la Argentina lleno de plata y en plena campaña presidencial de Cristina Fernández de Kirchner. Los audios requeridos son los que no fueron usados en el juicio que se siguió en ese país por espionaje a los venezolanos y en el que fue condenado Franklin Durán, un ex socio de Antonini. Los audios son necesarios para que el abogado argentino Guillermo Ledesma reconozca allí su voz en los diálogos con Antonini. Ledesma había viajado a Miami luego del escándalo para evaluar si asumiría la defensa del venezolano ante la Justicia argentina. Antecedentes Los dólares de la valija. La madrugada del 4 de agosto de 2007 la Policía Aeroportuaria descubre una valija llena de dólares que Alejandro Antonini intentaba ingresa al país sin declarar. Había bajado de un avión fletado por el Gobierno argentino y el conteo dio que eran 790.550 dólares. El escándalo. El incidente se conoció dos días después, en coincidencia con la llegada al país del presidente venezolano, Hugo Chávez, y en plena campaña presidencial de Cristina Fernández. Antonini ya había dejado la Argentina. No lo detuvieron porque para la Justicia era una infracción aduanera y no un contrabando o lavado de dinero. El juicio en Miami. Supuestos agentes de inteligencia venezolanos fueron condenados por las presiones que Antonini dijo haber recibido en Miami para no revelar el destino del dinero que había traído al país. La Fiscalía dijo que el dinero era para la campaña de la Presidenta. Los correos de un romance que no fue En los tribunales en lo Penal Económico se esperanzaron la semana pasada con la llegada de un demorado informe sobre los contactos epistolares por internet entre la ex secretaria de Claudio Uberti, Victoria Bereziuk, y el hijo del ex vicepresidente de PDVSA, Daniel Uzcátegui. Pero la esperanza se frustró al ver la documentación remitida por una empresa servidora de internet. Los datos, en principio, no arrojarían grandes novedades para la investigación, dijeron fuentes judiciales. Los contactos entre Uzcátegui -hijo del ex vicepresidente de PDVSA- y Bereziuk podrían arrojar más luz sobre el origen y, sobre todo, el destino del dinero que Antonini trajo al país en plena campaña electoral. Cuando fue el escándalo de la valija, Uzcátegui hijo tenía 19 años y, al parecer, quedó embelesado con Bereziuk, con quien habría intentado salir en Caracas en la fugaz visita de la argentina. La ex secretaria de Uberti le habría dicho que si viajaba a Buenos Aires en el avión que había fletado el Gobierno argentino a Venezuela, quizás tuvieran tiempo para hacer una salida juntos. El hijo del ex vicepresidente de PDVSA - a la vez titular de esa firma en la Argentinaterminó integrando la comitiva de venezolanos que llegó al país con los misteriosos dólares de Antonini Wilson. ✍ Lucio Fernández Moores REGRESAR |
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